El entrenador del FC Barcelona, Pep Guardiola, calificó como “peligrosísimo” el partido que disputaron ante el Xerez (0-2), de la decimoquinta jornada liguera y adelantado por su marcha al Mundialito de clubes, y aseguró que les costó todo “mucho”, consecuencia de la semana anterior, con choques de “mucha tensión”. “Nos ha costado todo mucho. En parte es normal, porque veníamos de partidos con mucha tensión y por eso hice cambios. Quería gente que tuviera frescura en piernas y cabeza. Está claro que el partido ha sido peligrosísimo porque hasta el 0-2 nada quedó sentenciado”, manifestó el de Santpedor. Por otro lado, el técnico culé analizó el encuentro de sus pupilos y afirmó que no estuvieron en su línea habitual, a pesar de la victoria en Chapín. “Nuestro problema fue de juego, de acercamiento al partido, que resultó muy igualado. Al final decidió la calidad del equipo”, admitió el técnico catalán. Y es que el preparador de los blaugrana comparó el choque ante el equipo de Cuco Ziganda con el que jugaron en Pamplona, donde el resultado fue de 1-1 perdiendo los azulgrana dos puntos en los instantes finales del choque. “Allí jugamos mucho mejor y nos fuimos tristes porque el empate llegó justo al final, pero aquí no hemos dado ese nivel”, dijo. Guardiola, que habló de “levantarse” por la dureza de estos últimos siete días, se refirió por último a las ausencias, en el once inicial, de Messi e Ibrahimovic. “Salían de lesiones y no nos convenía arriesgar demasiado”, finalizó.