La jornada 39 en la Liga Adelante ha aclarado un poco más las cosas por arriba y ha apretado la clasificación por abajo, al menos en lo que respecta a la última plaza que resta para el descenso.

En la zona alta, el Xerez está a un pequeño paso de hacer historia y convertirse en equipo de Primera la próxima temporada, tras su goleada ante el Éibar (3-0), al que envió a Segunda B, mientras que Tenerife y Zaragoza prácticamente también acarician la división de oro del fútbol español.

Los azulinos, en un encuentro intenso, de lágrimas por la emoción, por estar más cerca de ese sueño de alcanzar la Primera tras 62 años historia, matemáticamente tendrán que esperar a lograr ese punto que necesitan, pues el Hércules, cuarto, hizo tablas a dos ante el Celta en la matinal del domingo.

Por su parte, Tenerife y Zaragoza dejaron claro que en la recta final del campeonato no quieren descolgarse del tren que lleva a Primera y prueba de ello es que solventaron sus encuentros con goleadas ante el Sevilla Atlético (4-0) y Albacete (3-0), respectivamente.

Ambos se beneficiaron del tropiezo del Hércules de una nueva derrota del Rayo Vallecano en el campo del Levante (1-0), con lo que el equipo de Pepe Mel dice adiós a todas sus opciones. La Real Sociedad también se despidió de sus mínimas posibilidades con una derrota en casa ante el Córdoba (0-2).

Los guipuzcoanos desde hace varias jornadas llevan planificando la próxima temporada y por ello que el triunfo del Córdoba no fuera ninguna sorpresa, ya que los andaluces se encuentran en una zona complicada y necesitaban ganar para asegurar la permanencia. Con esta victoria el cuadro de Luna Eslava será con casi toda seguridad equipo de Segunda el año próximo.

El Hércules, cuarto, queda ahora a cinco puntos del Zaragoza y a seis del Tenerife, mientras que el Rayo tiene nueve de déficit respecto al conjunto aragonés y la Real once. Quedan tan sólo tres jornadas por delante. Lo peor es que el único aspirante, el cuadro alicantino, ha quedado muy tocado después de su último partido ante el Celta pues fallar un penalti en el tiempo de descuento y ver cómo se le escapan las opciones puede pasarle factura.

Bastante más tranquilo resultó el duelo valenciano entre el Elche y Castellón. Los dos equipos, bien situados en la zona tranquila de la tabla, dirimieron un encuentro que se resolvió a favor del conjunto visitante con una diana de Mario Rosas, que por cierto fue de los mejores goles de la jornada.

El Girona aseguró prácticamente su permanencia al ganar en el duelo regional catalán al Nástic (2-1), en lo que supone la segunda victoria consecutiva del nuevo técnico, Javier Salamero, un triunfo que le permite asegurar la permanencia.

Por su parte, el Murcia cogió oxígeno a costa del agónico Alicante (3-1), también descendido a Segunda B, el Alavés goleó al Huesca (3-0) e incrementó sus opciones de salvación, puesto que ahora tiene tan sólo a tres puntos al Celta, que marca la continuidad en la División de Plata.

Estos dos equipos se tendrán que ver las caras esta semana con lo cual la última plaza que resta para el descenso puede verse casi certificada con un triunfo de los vigueses, que condenarían de esta forma al cuadro de Javi López.

Las Palmas, donde debutaba en el banquillo Paco Castellano, no pudo encarrilar aún más la salvación al dejar escapar dos puntos de oro con el Salamanca, que igualó el encuentro en la prolongación. Los charros empataron gracias a un gol del joven nigeriano Akinsola, que está demostrando sus buenas condiciones en estos últimos partidos jugados.

El empate de los insulares les hace amarrarse el cinturón pues no pueden permitirse más tropezones tal y como está la tabla por la parte de abajo.