Se acabó el castign. Carlos Ríos es el nuevo entrenador del Xerez Deportivo. El técnico sanluqueño le ganó la partida a César Ferrando y Antonio Álvarez para suplir a Esteban Vigo y esta misma mañana ya dirigirá su primera sesión de trabajo en Chapín, en una sesión que será a puerta abierta, y luego será presentado.

El club hizo oficial su contratación ayer por la tarde en un escueto comunicado y firma por lo que resta de temporada con opción a una segunda campaña en caso de lograr la permanencia, un reto que en estos momentos tiene ya a siete puntos.

Rondán quería cerrar cuanto antes la contratación del nuevo preparador y en cuanto terminó la sesión de trabajo que él mismo dirigió a la primera plantilla se reunió con Joaquín Morales, Rafael Mateos y Francisco Javier López Ballesteros para tomar una decisión en firme. Al mediodía, el fichaje de Ríos ya era más que un secreto a voces.

El sanluqueño tendrá como segundo entrenador a Fernando Niño, mientras que el preparador físico será Manolo Salado Alfaro, que hasta ahora venía trabajando con Fernando Niño en el juvenil de Liga Nacional y Manuel Oliva recupera su puesto como entrenador de porteros.

La elección del segundo entrenador no ha sido fácil, aunque en el club tenían muy claro que iba a ser un técnico de la casa. Dani Pendín era uno de los exjugadores mejor posicionados pero no dispone de título nacional y no podía ejercer, por lo que Rondán y el propio Carlos Ríos se han decantado por el roteño, hasta ahora entrenador del Xerez juvenil de División de Honor y uno de los héroes del histórico ascenso a Segunda con Carlos Orúe en la temporada 96/97, que terminó en el Mallorca después del descenso.

El nuevo preparador azulino se ha mostrado en todo momento muy contento, ilusionado y agradecido por la confianza que han depositado en él en estos momentos y en la primera toma de contacto con la entidad no ha pedido ningún refuerzo, aunque será un tema que abordará junto al director deportivo en los próximos días, toda vez que el Xerez tiene una ficha libre y puede firmar a un jugador en paro y, además, está pendiente de la baja federativa de José Mari.

Juan Carlos Ríos Vidal nació en Sanlúcar y en su localidad natal comenzó a entrenar en los escalafones inferiores del Atlético Sanluqueño hasta llegar al primer equipo. Entre sus logros, hacer debutar en Tercera División con apenas 17 años a Nolito, exjugador del Barcelona ahora en las filas del Granada a las órdenes de Lucas Alcaraz.

Del Sanluqueño se marchó al Alcalá, para recalar luego en la Balona y volver al cuadro sevillano para ascenderlo a Segunda B. Su trabajo no pasó desapercibido para el Almería y terminó entrenando a su filial, al que también ascendió a Segunda B pero en esta oportunidad gracias a una carambola en los despachos.

Y de una punta de Andalucía, a la otra. En verano de 2010 se hizo con las riendas del filial del Recreativo pero dio el salto a la primera plantilla del Decano y triunfó. Tras ser renovado, dimitió antes del inicio de Liga y la pasada campaña entrenó al Cartagena. No tuvo fortuna y el conjunto departamental no se libró del descenso a Segunda División B.