Vito, exlateral del Xerez, está viviendo unos duros momentos en el Arcos. El jugador se produjo hace un par de meses un esguince de rodilla que le ha dado más problemas de los esperados. Y es que cuando ya entrenaba con el grupo y su reaparición estaba cerca, se ha vuelto a romper. En la sesión de trabajo del pasado lunes realizó "un giro no demasiado brusco con la rodilla, me crujió y sentí algo indescriptible, tuve una sensación que jamás había tenido. Me dolía muchísimo y hasta me mareé. Me han hecho pruebas en el Hospital de Jerez y el traumatólogo me ha comentado que tengo roto el menisco y también que tengo bastante líquido pero también debo hacerme una resonancia para descartar cualquier daño en los ligamentos, que es lo que temo. Hasta que no me hagan las pruebas, no me quedaré totalmente tranquilo, aunque, como ya he comentado, es lo que me han dicho, que no tengo nada más".

Aún con el susto en el cuerpo, sobre el choque de mañana ante su exequipo en Guadalcacín afirma que "es una pena lo que le ha pasado al Xerez. Me hubiese encantado jugar ese encuentro y en otras circunstancias. Cuando yo me marché, las cosas estaban mal pero no tanto. La temporada ha terminado para los chavales y para el míster de la peor forma posible, no se lo merecen por lo mucho que han trabajado. Ellos se han tenido que comer el marrón del descenso y de la horrorosa gestión de Ricardo. Ellos no son los culpables de lo que ha pasado ni mucho menos".

El Arcos se la juega mañana y el defensa espera "salvar la categoría. No hemos sido bastante irregulares, hemos alternado buenos resultados con rachas muy negativas y eso nos ha conducido a estas alturas a no estar salvados y estar pasando más apuros de los que el equipo merece. Creo que si somos capaces de sacar adelante un par de encuentros más, podemos conseguirlo y por ello estamos luchando".