San José Obrero-Xerez DFC

David casi sorprende a Goliat (0-1)

  • Victoria por la mínima en el derbi de un conjunto azulino que continúa mostrando lagunas en su juego frente a un rival ordenado, con más intensidad y que merece al menos un punto

La pelea de David contra Goliat es de sobras conocida. La gesta del soldado pequeño contra el gigante es una parte de la historia bíblica que todo el mundo recuerda. Ayer, el San José Obrero, David, casi supera a Goliat, el Xerez Deportivo FC.

Blanquiverdes y azulinos se citaban en Chapín en un derbi en el que los de Canito cumplían con todos los cánones de conjunto modesto, pero llegaban con la ilusión de ganar y de hacer un buen papel frente a un gigante que debía estar muy por encima del cuadro que actuaba como local en el Municipal por presupuesto, objetivo y plantilla. Casi convierten en realidad lo que para muchos, por razones obvias, era un sueño inalcanzable.

El San José Obrero tuteó al Xerez DFC durante muchos minutos, jugó con una marcha más y vendió cara su derrota. Un gol de Guille, a los dos minutos, dio a los de Dani Pendín, que siguen mostrando muchas lagunas en su juego, su cuarta victoria consecutiva y les permite mantenerse en lo más alto de la clasificación.

El fútbol, a veces, suele ser injusto y no siempre gana el mejor pero los números son totalmente objetivos y apenas conceden margen a la interpretación. Los azulinos lo han ganado todo. Dentro de un mes o de dos, los aficionados no recordarán si el equipo jugó mejor o peor, sólo recordarán que el Xerez DFC se quedó con los tres puntos en el primer derbi de la temporada. Volvieron a sufrir más de lo deseado y más de lo debido, pero vencieron. Un triunfo más y una jornada menos para el objetivo.

La diferencia entre un equipo y otro debía ser grande pero no se notó sobre el cada vez menos verde césped de Chapín. Guille, novedad en el once inicial en lugar de un Morlán que se quedó hasta fuera de la convocatoria, aprovechó la primera ocasión que se le presentó para superar por alto, con calidad y tranquilidad al guardameta Coega cuando apenas habían transcurrido dos minutos del encuentro.

Todo se le ponía de cara a un Xerez Deportivo FC que quería mejorar la imagen mostrada la pasada semana actuando como local ante el Chiclana Industrial pero no fue así. A los ocho minutos se le comenzaron a complicar las cosas. Lolo Garrido, que volvía al centro del campo tras cumplir su partido de sanción, caía lesionado y tuvo que dejar su puesto a Olmo. La medular se resintió lo suyo.

A los de Canito no les intimidó el gol de Guille y, poco a poco, fueron ganando confianza e intentando poner en apuros a Villegas. Al cuarto de hora, el árbitro anuló un tanto a Antoñito por posible fuera de juego. Cinco minutos más tarde, Borja le sacó con la punta de la bota un balón claro que se disponía a rematar Iván Asencio y a renglón seguido, Edu Villegas se tuvo que emplear a fondo ante el hábil jugador local para evitar el empate.

Las acometidas de los de Canito apenas encontraban respuesta por parte de los azulinos, que ayer apenas mostraron su arsenal ofensivo. César lo intentaba una y otra vez por su banda pero sus acciones casi nunca encontraban rematador. Justo antes del descanso, Guille probó fortuna con un lanzamiento de falta desde la frontal pero el disparo se le marchó alto.

El segundo acto arrancó del mismo modo que terminó el primero, con una acción de ataque de los de Pendín. Un defensa impidió un remate de Orihuela tras un centro de César (57').

El juego, a medida que fueron pasando los minutos, se hizo menos fluido por parte de los azulinos y cada vez les costaba más crear y llegar con facilidad, mientras que los locales seguían a lo suyo. Mantenían el orden, apretaban e intentaban tapar todos los huecos por los que les podían crear peligro. Aún así, Juanma rozó el 0-2 con un remate que atajó Coega (71').

El cansancio comenzó a hacer mella y las pérdidas de tiempo empezaron a aparecer pero el San José Obrero perdonó el empate a un minuto del final. Iván Asencio se plantó solo ante Villegas y con todo a favor mandó el balón fuera.

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