No hubo sorpresa en La Juventud, donde un animoso San Benito acabó claudicando ante el potencial del Xerez Deportivo FC, que sigue contando sus partidos por victorias y en poco tiempo empezará la cuenta atrás para el ascenso matemático: son ya diecisiete los puntos de ventaja con respecto al cuarto clasificado. En el duelo del Chicle, lo mejor fueron los valientes que se acercaron al campo pese a la lluvia, al viento y al frío, y la deportividad en un duelo local en el que ni siquiera saltaron chispas, y eso que el estado del terreno de juego, pesado y resbaladizo, dio para más de un encontronazo.

Y a falta de juego de calidad, imposible por el estado del campo, que marcó el desarrollo del partido, sobresalieron los tres goles de la primera parte con los que el equipo de Orúe liquidó la contienda. El primero, cuando el San Benito todavía trataba de buscarle las cosquillas a los azulinos, de Orihuela pasados los veinte minutos, un derechazo desde unos treinta metros ajustado al palo izquierdo de Juan Carlos, que cuando quiso reaccionar, algo descolocado, ya fue tarde; el segundo, una jugada de tiralíneas con pase en profundidad al flanco izquierdo del ataque xerecista, donde César llegó a lo justo y con su zurda, un guante, puso un balón raso al vértice del área pequeña, donde apareció Barba llegando desde atrás para ganarle la partida al portero del Sambe y con un toque suave enviar el balón al fondo de la red, jugada del libro de estilo de este equipo; y el tercero, en un arranque racial de Ale Padilla, que agarró el balón en el medio campo y se fue deshaciendo de los que le salieron al paso en su carrera vertical hacia Juan Carlos, al que batió en su salida.

Tres goles de bella y distinta factura que acabaron con la resistencia de un animoso San Benito, que arrancó muy enchufado volcando el derbi hacia la portería de Edu Villegas, buscando a Pedro y a Fuentes en las bandas mientras Álvaro, Alejandro y Borja trataban de conectar en la sala de máquinas. Enfrente, al Xerez Deportivo FC le costó entrar en juego porque Copero y Orihuela no se encontraban, con lo que Lolo Garrido -que dio un curso de corte y confección- se multiplicaba para rebañar los rechaces, que ayer abundaron al impedir el terreno de juego una circulación fluida, y así frenar a los del polígono.

Poco a poco, el Xerez DFC fue igualando la contienda y haciéndose con el control, recuperando rápidamente el balón aunque con problemas para moverlo de medio campo hacia adelante. Orihuela ya aparecía más y su derechazo desde lejos rompió el derbi. Juan Carlos no pudo girarse con rapidez, quizás también por el estado del terreno de juego, y el misil tierra-aire del arquitecto azulino acabó abriendo el marcador.

Con el 1-0 comenzó a ceder la resistencia del San Benito y el partido ya solo tuvo una dirección: Padilla enganchó un derechazo desde fuera del área que salió alto tras despejar de puños Juan Carlos una falta lateral y Barba no pudo rematar dentro del área una triangulación desde la izquierda y en corto de los visitantes, que movían bien el balón para salir de la presión local.

Barba sí llegó a una internada de César y cuatro minutos después, Ale Padilla se cocinaba el tercero en jugada personal. El Xerez DFC había liquidado el derbi aunque el San Benito tuvo la última de la primera mitad, un derechazo de Borja tras recorte dentro del área al que respondió con solvencia Edu Villegas metiendo la mano para despejar.

La segunda mitad casi sobró, fue más floja y deslucida por los cambios y el cansancio, porque el campo parecía hacerse más pesado conforme avanzaban los minutos, con más resbalones y atasco en el centro del campo. Y si había resquicio para la duda, Guille aprovechó a los cinco minutos que Sergio no pudo atajar un lanzamiento de falta de Benítez para cerrar el marcador. en esa falta el árbitro perdonó la roja al meta visitante, que medía mal su salida y derribaba a un atacante azulino con toda la ventaja para haber marcado.

De ahí al final, dominio de los visitantes con llegadas por bandas y triangulaciones por el centro a las que faltó remate; los locales lo intentaron en jugadas a balón parado y tuvieron su ocasión tras un despeje de puños de Pablo Serrano, pero el disparo local lo desvió el de siempre, Romerito, a córner.

Rosillo, Padilla, Benítez, Lolo Garrido y de nuevo Rosillo pudieron incrementar el marcador en un derbi que quedará para el recuerdo de José Alberto Sánchez, futbolista del juvenil B del Xerez DFC que debutó en el primer equipo como lateral derecho.