Tarde de expectación, tarde de decepción. El Xerez DFC sigue sin levantar cabeza en Chapín y volvió a encajar una derrota tan dolorosa como sonrojante ante el Cartagena B por 0-2 que le devuelve a los puestos de descenso. Los azulinos realizaron un mal partido, especialmente en la primera mitad.

Francis, en su intento de buscar el primer triunfo de la temporada en casa, retocó el once respecto al que se impuso al Recreativo Granada por 1-2 hace dos semanas en la Ciudad Deportiva. En defensa, con Oca recuperado, apostó por el jerezano y Durán como centrales y prescindió de Razvan en la izquierda para colocar a Ricky como lateral. En la medular, sin Rafa Parejo por segunda jornada consecutiva fuera de combate por su lesión, optó por un doble pivote con Alberto Durán y Joao Paulo. Bello se quedó de inicio en el banquillo, y Baeza, José Ramón Erik y Simeone actuaron por delante.

Desde el minuto uno todo le salió mal a los azulinos, que lo intentaron en un par de acciones a balón parado sin consecuencias. Y sí las tuvo en la primera llegada del Cartagena B, que se adelantó en el minuto 8 con un buen gol de De Santis tras aprovechar una jugada que se fraguó tras una mala entrega de Manu Baeza. 0-1.

El Xerez DFC no se sentía cómodo en el verde frente a un rival que interpretaba a las mil maravillas la partitura del encuentro que quería en un escenario como Chapín y ante un rival directo en la lucha por huir de los puestos de la zona caliente de la clasificación.

Estaba más cerca el 0-2 que el empate. Erik Aguado probó fortuna y su tiro se le marchó alto. Los de Francis, con la medular perdida, no generaban y el filial del Efesé se mostraba letal a la contra. A los 14 minutos, Luis Castillo enmudeció a la grada. Perdonó el segundo con todo a favor. 

Los jugadores del Cartagena B celebran su segundo gol al Xerez DFC.

Vendaval visitante

El vendaval visitante arreciaba y en el 22, apareció Quesada para mandar a saque de esquina una bonita acción entre Teddy y Luis Castillo. El crono volaba y el cuadro de Pepe Aguilar, también. Ricky se tuvo cruzar casi todo el campo para evitar otra contra de manual y justo después, el 0-2 en el minuto 24. Nacho Pais se la pica a Quesada después de una bonita acción colectiva, con dejada incluida de De Santis.

Los cartageneros no se creían las facilidades y De Santis intentó el más difícil todavía ante un rival noqueado, que en ataque apenas ponía en apuros al rival. Vio adelantado a Quesada y casi desde el centro del campo buscó sorprenderle con una grada que empezaba a impacientarse.

Los azulinos estaban a merced del rival y De Santis, una pesadilla, se jugó el uno contra uno ante Quesada con un remate con efecto que también se marchó fuera por centímetros. Simeone, remando contra corriente, a la media hora tuvo una buena oportunidad, pero su tiro se fue directo a las manos de Aguirre.

Sin tregua, Teddy, en el 37', otra vez probó fortuna y en el 39', apareció de forma milagrosa Sergio Martínez para evitar el 0-3. Un tiro de De Santis, que superó a Quesasda, lo sacó el central desde la línea. Los dos equipos enfilaron el vestuario con una grada que pitaba tanto a sus jugadores como al colegiado. El 0-2 era el mal menor.

Manu Baeza, que dejó su plazsa a Bello, intenta marcharse de De Pedro.

Cambios para la reacción

El segundo acto arrancó con cambios en los dos equipos. En el Xerez DFC, Bello y Carri saltaron al verde en lugar de Alberto Durán y Erik Aguado y poco después, fue Manu Baeza el azulino que abandonó el campo para dejar su plaza a Edu Salles. Francis jugaba con todo y su equipo ganaba movilidad, ritmo y toque, pero armas insuficientes.

El cuadro azulino tenía más el balón, pero el Cartagena B seguía cómodo y cedía el protagonismo a los xerecistas, que le metieron una velocidad más al encuentro y comenzó a generar más peligro. Un tiro de Bello lo detuvo Aguirre y en 64', jugada polémica. El árbitro anuló un gol a Edu Salles por falta previa de Simeone a Djaka en la que incluso pudo haber penalti. Salles, muy activo, quería recortar distancias y en el 67' animó aún más al la grada con un zurdazo desde la media luna del área que se fue marchó fuera por poco.

El Cartagena B daba un paso atrás, defendía con muchos jugadores en el área y comenzaba a complicarse, aunque los xerecistas no encontraban la recompensa a su empuje. Las contras peligrosas de la primera mitad ya no se producían y eso estimulaba al Xerez DFC, pero la escuadra azulina estaba espesa y se estrellaba contra el muro blanquinegro. Ni en las acciones a balón parado estaban acertados.

Javi Navas, que tuvo minutos después de mucho tiempo, aparecía en ataque, pero ni él ni sus compañeros podían con un adversario sólido y que se hacia acreedor del triunfo sin paliativos. La afición empezó a desfilar minutos antes del final del partido y muchos seguidores no se quedaron ni para presenciar los seis minutos de descuento. Carri acarició el 1-2 en los últimos instantes, pero ya eso era lo de menos porque la derrota era ya inevitable.

La afición que quedaba en el estadio parecía que no tenía cuerpo ni para abroncar a un Xerez DFC que no estuvo a la altura ante un rival directo de la zona baja de la tabla, pero esperó a que los rivales se retirasen para despedir a los futbolistas con pitos. Mucho trabajo por delante y ahora llega un calendario duro.

Once inicial del Xerez DFC en Chapín frente al Cartagena B.