¡Por fin, fiesta de Primera!

Equipo y afición fueron uno. 'A Primera, oé', 'esta es tu grada, tu grada la que anima', o con el mítico forza Xerez Deportivo...', celebró la afición xerecista el ascenso a 1ª Provincial tras su sufrido triunfo ante el Guadiaro por 3-1.

La ocasión lo requería. La fiesta no era para menos y Chapín se vistió de gala, emulando a sus no muy lejanas tardes de gloria en las que equipos de Primera División pisaron su césped, para homenajear a un grupo de jugadores que se han ganado a pulso la feliz recompensa. Atrás han quedado siete meses de duro trabajo con un Carlos Orúe que lleva a rajatabla eso de la disciplina, aunque no se pudo librar ni del clásico manteo ni de la ducha.

Con la celebración, los azulinos le ponen el broche de oro a una temporada que debe ser histórica. El XDFC ha logrado el primer reto, el ascenso, pero a partir de ahora luchará por el segundo, ser campeón. El objetivo lo tiene a tiro y con el nivel de exigencia de su técnico, el segundo lo logrará fijo.

Los azulinos hacían realidad más que el sueño, la ilusión de tantos y tantos xerecistas desencantados con el otro Deportivo. Ocho mil almas en las gradas son muchas. El sentimiento es grande y la pasión, aún más.

Los jugadores al final del partido, como no podía ser de otro modo, explotaron de júbilo e hicieron vibrar a la grada cuando todos se agruparon para mostrar una gran pancarta que rezaba 'gracias xerecismo'. La euforia contenida durante los noventa minutos se desbordó de forma especial cuando los futbolistas se plantaron ante Fondo Sur. Las bengalas, prohibidas por cierto, y los botes de humo dieron colorido a la celebración.

Los protagonistas fueron los jugadores, con Edu Villegas y Dani Pendín como los más aclamados. Los técnicos, con Paco Ramírez entre ellos, y los directivos estuvieron siempre en segundo plano y sólo en el vestuario dieron rienda suelta a su alegría por el trabajo bien hecho.

Dentro de una gran tarde de fiesta y tras el primer gol xerecista, el club se vio obligado a dar un toque de atención a parte de la afición. Desde Fondo Sur se lanzaron varios petardos, con el peligro que eso conlleva, que cayeron en las pistas de atletismo.

El Xerez DFC preparó un fin de fiesta modesto. Para los seguidores, lluvia de cohetes mientras los dos equipos posaban para una foto histórica y los jugadores le daban la vuelta de honor al campo. Un ascenso distinto pero con un valor sentimental muy especial para muchos xerecistas.