Jerez

Vinoble 2014 empieza a rodar

  • El Ayuntamiento resucita la cita del Alcázar tras la suspensión de la última edición Confía en contar otra vez con apoyo económico de la Junta

El Salón de los Vinos Nobles (Vinoble) volverá en 2014 a ocupar un lugar destacado en el calendario de grandes eventos de la ciudad. Tras la suspensión de la edición del año pasado por la crisis económica global y la falta de liquidez de las arcas municipales, el Ayuntamiento ha decidido resucitar Vinoble en su ciclo natural de los años pares, cita para que ya se ha empezado a trabajar internamente con idea de reflotar el gran escaparate jerezano de los vinos generosos, licorosos y dulces especiales.

No hay tiempo que perder, o al menos así lo ha entendido el gobierno local liderado por María José García-Pelayo, quien en próximas fechas anunciará el inicio de la andadura de la próxima edición del salón, al que se busca encaje en la segunda mitad de mayo o la primera quincena de junio, entre la feria y el inicio del verano.

La delegación de Impulso Económico quiere tener cerrado el presupuesto nada más acabar las fiestas navideñas, en torno al 10 de enero, asunto al que dedican su atención en estos días los mismos técnicos municipales que se hicieron cargo de las últimas ediciones.

Lo primero, y fundamental para cerrar las cuentas, es saber si la Junta de Andalucía está dispuesta a reconsiderar la retirada de su apoyo económico al certamen, uno de los desencadenantes de la suspensión de la última edición de la cita de carácter bienal. La Junta tendrá oportunidad de pronunciarse la próxima semana, en la que la institución jerezana del vino, con el apoyo de los consejos reguladores del resto de denominaciones de origen de vinos generosos andaluces -Montilla-Moriles, Condado de Huelva y Málaga-, sacará el tema a colación a modo de avanzadilla en una reunión sectorial con responsables de la Consejería de Agricultura.

A expensas de la respuesta de la Junta, las primeras cuentas de los técnicos de Impulso Económico están en línea con el presupuesto de la pasada edición, en la que estaba previsto un gasto de 234.000 frente a unos ingresos de 224.000 euros. Dentro del capítulo de ingresos figuraban la aportación de 50.000 euros del Consejo Regulador y 174.000 euros de ventas, en particular por la ocupación de los stands, mientras que los 10.000 euros del déficit previsto eran asumibles por las maltrechas arcas municipales.

Las "estrecheces económicas" obligan a "ajustar mucho" el presupuesto de la próxima edición, explica el delegado de Impulso Económico, Francisco Cáliz, quien no obstante puntualiza que la dotación "será suficiente para garantizar el nivel de la cita e incluso mejorarla", en lo que no deja de ser la aplicación práctica de la extendida filosofía del más con menos y que, según el responsable municipal, es posible gracias a la reducción de gastos por el menor coste de determinados servicios en la coyuntura actual, en la que impera la tendencia a la baja en la oferta de servicios por la fuerte competencia.

El Ayuntamiento tiene una deuda moral con Jesús Barquín, la persona designada para sustituir a Pancho Campo como comisario de Vinoble y que se quedó en puertas ante la suspensión del evento. Sin embargo, hasta el pasado jueves aún no se había puesto en contacto con el catedrático y experto en vinos, también conocido por su labor al frente del Equipo Navazos, para ofrecerle la posibilidad de estrenarse en el cargo.

En los tiempos que corren, "donde hay que partirse el cobre es en la comercialización de stands", señala Cáliz, quien recuerda, no obstante, la buena respuesta de los expositores que había para la edición de 2012 antes de su suspensión y que, a su juicio, obedece al prestigio internacional alcanzado por el evento.

En el inicio del rodaje de Vinoble 2014, los técnicos de Impulso Económico medirán los errores y aciertos del pasado con idea de corregir los primeros y afianzar los segundos, asegura el delegado municipal del ramo, quien se apresura a resaltar que la cita mantendrá su carácter profesional y elitista. El reto es cuidar la calidad y que no se pierda el prestigio alcanzado en las siete ediciones celebradas hasta la fecha, interrumpidas el año pasado por la decisión del Ayuntamiento de no celebrar ningún evento que aumentase el déficit municipal.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios