Una pisa de la uva en igualdad

Ante un numeroso público, el reducto de la Catedral fue escenario ayer de la celebración del nacimiento del nuevo mosto. A pesar del sofocante calor, la Pisa del Uva volvió a convertirse ayer en el evento más emblemático de las Fiestas de la Vendimia. El acto se celebró como es tradición junto a la Catedral en recuerdo de los aranceles sobre el vino que ayudaron a la edificación de ese templo. Además, ayer contó con una novedad, la presencia por primera vez de vendimiadores junto a las tradicionales vendimiadoras -que el año pasado no estuvieron y nadie explicó el motivo de esta destacada ausencia-.

La Pisa de la Uva se vio, sin embargo, deslucida por la protesta convocada por el Sindicato Independiente de la Policía Local. El ruido ensordecedor de los manifestantes provocó que el sonido del acto apenas pudiera oírse y que muchos asistentes se marchasen a los pocos minutos de sentarse entre el público, dejando algunas sillas vacías. Tan sólo durante el himno de España se guardó silencio en la Catedral. Aun así, multitud de personas siguió el acto en directo y esperó hasta la finalización del mismo para disfrutar de un vaso de vino de la tierra.

Tras la Pisa, la alcaldesa Mamen Sánchez agradeció ayer a los representantes de las instituciones presentes su aportación y esfuerzo que "han hecho posible la celebración de un ciclo festivo tan relevante como son las Fiestas de la Vendimia". También tuvo palabras de agradecimiento para el Consejo Regulador del Vino, y su presidente, Beltrán Domecq, así como para la comisión organizadora de las fiestas" y aseguró que "este gobierno se ha volcado en la organización de este ciclo, y no vamos a escatimar esfuerzos para seguir mejorándolo y promocionándolo". Sánchez destacó que "acabamos de vivir un momento tradicional y emocionante, que nos permite presenciar el origen de nuestra cultura vitivinícola, nuestra Pisa de la Uva. Con la Pisa de la Uva reivindicamos la historia de nuestro jerez, y rendimos homenaje a todos y cada uno de los jerezanos que han aportado su trabajo, su sudor y su ilusión para hacer posible el tesoro que surge de las tierras albarizas, y que hoy se convierte en el mejor embajador de Jerez en los cinco continentes".

Asimismo, hizo hincapié en que "esta Pisa de la Uva rinde homenaje a nuestros abuelos, a nuestros padres, y también a los que hoy, en un momento de crisis y con tantas dificultades, seguís peleando y trabajando por nuestros vinos y por nuestras bodegas". Igualmente, tuvo palabras cariñosas para "profesionales tan queridos y tan añorados, como nuestro querido Manolo Lozano, y nuestro querido Antonio Páez, que tan recientemente nos han abandonado".

En este punto, la regidora socialista manifestó también que "entendemos la cultura como un vehículo de desarrollo económico, y estamos convencidos de que Jerez es el mejor destino posible en cualquier momento del año".

Tras finalizar la Pisa, la alcaldesa Mamen Sánchez presidió, en el Patio de Armas de el Alcázar, acompañada por miembros del equipo de Gobierno, la recepción oficial y acto de entrega del Premio IV Concurso de Relatos Breves 'Fiesta de la Vendimia de Jerez' al ganador Juan de Molina y a Juan Manuel Sainz Peña, ganador de un accésit por sus obras, 'El cerezo rosa' y 'De vinos y mancebías', respectivamente.