Concierto 'De gala con los Goya' | FIMUCS

Crónica de una noche discreta

  • Dentro de las actividades previas a la entrega de los Goya del próximo 11 de febrero, el segundo concierto del II FIMUCS estuvo dedicado a las músicas del cine español. 

El segundo concierto sinfónico del II FIMUCS estaba íntegramente dedicado a la música del cine español, aunque ya el primero del jueves 26, con una selección de éxitos populares del cine de fantasía, animación y aventuras internacional, incluyó algunas suites a cargo de compositores nacionales como Luis Ivars (Capitán Trueno), Zacarías M. de la Riva (Tadeo Jones 3) y Joseba Beristain (Elcano y Magallanes, la primera vuelta al mundo).

En el escenario del Cartuja Center, la ROSS bajo la batuta del especialista David Rico Hernando. En el programa, maestros pioneros de la composición cinematográfica en España como Augusto Algueró, con una suite que incluía alguna de sus luminosas y más conocidas bandas sonoras, de El ruiseñor de las cumbres a Las chicas de la Cruz Roja; veteranos en activo como José Nieto, que ofreció una suite de su Carmen para Vicente Aranda; algunos miembros de aquella generación de los noventa que profesionalizó la música para el cine español como Bingen Mendizábal, que regresaba a Sevilla tras su memorable concierto de 1997 junto a Koldo Uriarte para presentar una compacta suite de Baby, de Bajo Ulloa, Víctor Reyes, de quien sonó su lírica En la ciudad sin límites, o Roque Baños en modo thriller de ambientación sevillana (La piel del tambor); y también algunos destacados miembros de la última hornada de formación de escuela y sonido globalizado como Arnau Bataller (Mediterráneo), Manu Riveiro (La sombra de la ley), el hispano-argentino Federico Jusid (El verano que vivimos y Orígenes secretos) o Zeltia Montes, ganadora del Goya en 2022 con El buen patrón.

Casi todos ellos estuvieron presentes en una sala que apenas presentó media entrada y de la que no terminó de arrancar el entusiasmo deseado en una gala conducida con cierta desgana por un Antonio Dechent demasiado pegado a las cartulinas del guion.   

La apuesta del festival parece clara y decidida por la música de cine made in Spain, aunque cabe preguntarse si el formato orquestal y sinfónico es el que mejor atestigua hoy por hoy la diversidad de nuestro cine y el talento y la versatilidad de nuestros compositores. Un vistazo a las músicas nominadas al Goya de este año dice otra cosa: Modelo 77, de Julio de la Rosa, o As bestas, de Olivier Arson, dos de los mejores trabajos de la temporada, apuestan ya por otras sonoridades, tratamientos y asociaciones musicales que también nos gustaría escuchar en vivo.

Se entiende así que algunas piezas del programa vinieran artificialmente amplificadas o estiradas para ajustarse (en estreno mundial) al formato grande o a la autonomía expresiva de un concierto, lo que no siempre jugó a su favor. Especialmente flagrante y doloroso fue lo de El buen patrón, una partitura de precisión y matices minimalistas concebida originalmente para grupo de cámara que desfalleció irremediablemente en tempo, forma y duración trasplantadas al conjunto de las cuerdas y los vientos madera. Una lástima.

Tampoco terminó de funcionar la anunciada ilustración con imágenes de las películas, todo sea por hacer el espectáculo más ameno e integral. O bien algunas no aparecieron o bien lo hicieron en una secuencia arbitraria, lo que a la postre no contribuyó demasiado a levantar los ánimos o a entender mejor el sentido dramático de las músicas.   

No hace falta ser un experto en acústica para darse cuenta de que la sala grande del Cartuja Center absorbe, engulle y aplana el sonido de la orquesta antes que proyectarlo o desvelar los matices instrumentales, principal escollo sobre el que se desarrolló buena parte del concierto.

A los postres, el Alcalde y alcaldable llegó justo a tiempo para la foto finish donde todos los músicos, compositores, invitados ilustres, representantes institucionales y organizadores del evento recibieron en pie el aplauso del respetuoso respetable. Sigue así la cuenta atrás para la ceremonia de los Goya. Se va a hacer larga.