Duro estreno en el banquillo de Gómez al frente del Xerez CD ante Sagrado Corazón

El Xerez CD de Baloncesto recibe este domingo (12:30) en el Ruiz-Mateos al Sagrado Corazón en un enfrentamiento que se presenta muy desigual, ya que los dos equipos llegan con rachas contrarias. La cita, además, es especial para los locales, ya que se estrena en el banquillo tras la salida de Gabo Loaiza Francisco Gómez, que confía en sentar las bases del plantel de cara a la próxima temporada. El técnico, igualmente, apuesta por un cambio de sistema que los jugadores "están asimilando rápido por la calidad y el trabajo que son capaces de desarrollar".

El nuevo entrenador del Xerez CD confía en la concentración, la motivación y el espíritu de equipo de sus jugadores para afrontar una transformación arriesgada y espera que los cambios empiecen a notarse en el complicado partido de este domingo.

Su llegada al club admite que ha sido "muy rápida, pero estoy muy contento por la decisión de la directiva de contar conmigo para afrontar este reto" y, aunque lleva muy pocos entrenamientos con la plantilla, se muestra "muy ilusionado, encantado con el grupo humano que me he encontrado y convencido de que lograremos entre todos mejorar la situación actual y de que seremos capaces de sentar las bases para la próxima temporada".

El rival

Sobre el complicado compromiso frente al Sagrado Corazón, Gómez apunta: "Lo principal siempre, y más en estos momentos, es centrarnos en lo que queremos hacer y en cómo queremos hacerlo. Teníamos la opción de ir modificando cosas poco a poco, pero darle continuidad a un trabajo que, después de seis meses de entrenamiento y tras jugar catorce partidos no ha dado el resultado esperado, no tenía mucho sentido".

De todos modos, también subraya que "introducir tantos cambios en tan poco tiempo puede parecer muy arriesgado, ya que supone pedir a todos los componentes del equipo un gran esfuerzo de concentración, motivación y, especialmente, de espíritu de equipo, pero los jugadores se han mostrado predispuestos".

Bajo su punto de vista, "está claro que enfrentarse a Sagrado Corazón no es lo mejor si tenemos en cuenta su potencial de cara un posible resultado, pero ya he comentado que los jugadores van a ir asimilando, con su calidad y su trabajo, estos nuevos conceptos y formas de juego con mucha rapidez. Ojalá seamos capaces de mostrar ya este domingo algo o una buena parte de lo que nos hemos planteado hacer".

Ambiciosos retos

El primer choque en el banquillo se lo toma con cautela. "Somos conscientes de nuestra situación en la clasificación y de las dificultades a las que nos estamos enfrentando, pero vamos a trabajar y a esforzarnos al máximo para intentar revertirla. Es sólo el primer partido de muchos que vamos a tener, así que es tan bueno como cualquier otro para comenzar esta nueva andadura. La idea es que la dinámica de trabajo que iniciamos el lunes tenga continuidad la temporada que viene".

Pese a que el equipo está hundido en la tabla, se considera "muy ambicioso" y a nivel deportivo espera que "el equipo sea capaz de competir al máximo y de que la afición vea en la cancha a un equipo cohesionado, que desarrolla un baloncesto alegre y vistoso. El baloncesto es un deporte de equipo, por lo que voy a esforzarme para que todos, sin excepción, se sientan importantes dentro del grupo y me encantaría que al final de temporada todos los componentes del equipo nos sintamos orgullosos de formar parte del mismo".