Primera Andaluza: La Juventud deja de ser talismán

Entre el mal juego y el calamitoso arbitraje del sevillano Montero Garrido, el Xerez B dejó escapar los primeros puntos de la temporada en La Juventud, empatando a cero con la Olímpica Valverdeña. El punto le sirve al cuadro de Alvarado para seguir en el grupo de cabeza y mantener distancias con el conjunto onubense, si bien el Conil se marcha ya a cinco puntos de los xerecistas.

El filial estuvo frío como la mañana que hizo ayer en La Juventud y fue de más a menos. Los primeros minutos invitaban al optimismo, con ambas escuadras buscando la portería contraria; el Xerez B, eso sí, con más descaro que su oponente y trenzando bien el juego en el centro del campo. Por su parte, la Valverdeña intentaba sorprender a la contra. Avisó el incombustible Fajardo a los doce minutos en un lanzamiento de falta que casi sorprende a Toni, que esperaba el centro y no el disparo del onubense. El balón rozó el palo izquierdo.

La respuesta azulina fue rápida, con un envenenado tiro de Juanito que Fermín sacó de forma milagrosa con la mano izquierda mandando a córner. A la salida de éste, Juanma (que no pudo acabar el partido con una brecha en la cabeza) remataba por encima del larguero.

Pasada la media hora, el Xerez B intensificó su dominio y el gol pudo llegar en tres acciones casi consecutivas. Rosillo, primero, lanzó demasiado escorado; luego Adri Cuevas remató de cabeza alto; y por último Juanito voleó con idéntico resultado.

La segunda parte comenzó con un remate de cabeza del recién entrado Kike, pero el xerecista picó en exceso el balón y éste salió por encima del larguero. Poco después Fermín envió a córner un disparo potente pero centrado de Dani Cadena

La Valverdeña, poco a poco, se fue encontrando más cómoda sobre el terreno de juego y tuvo también sus opciones para llevarse el partido. Fajardo habilitó a Carlos y al disparo del delantero respondió Toni con una buena estirada. El guardameta se empleó a fondo de nuevo ante Fajardo en otra buena ocasión onubense.

En los minutos finales, las decisiones arbitrales desquiciaron a los locales. Se reclamaron dos penaltis en el área de la Olímpica, uno por manos de Víctor y otro en el último minuto del descuento por una falta a Corti que pareció muy clara. Montero Garrido perdió definitivamente los papeles, permitió las pérdidas de tiempo de los jugadores de la Valverdeña y al final terminó expulsando al técnico xerecista.