En la disciplina de Acoso y Derribo no se hereda nada. Bueno sí, la afición, la montura y el palo. Poco más. En los quinientos metros de fuerte galope que ponen a prueba valentía y destreza hay que pelear hasta el último empujón para ser alguien, como hicieron ayer y el viernes los hijos de los currados garrochistas Pedro Torres y Domingo Flor, Juan Pedro Torres Rubiales y Domingo Flor Regordain, hoy convertidos en campeones de Andalucía de esta extrema disciplina ecuestre. La pareja jerezana, la más joven del concurso, se secó los callos de la mano derecha después de tumbar y voltear a las gordísimas vacas bravas y mansas que el corredero de Vicos liberó para ellos. No fallaron una sola echada de todas las posibles y sólo les faltó tino o fuerza para darle la vuelta completa a una de las reses. Al final, 57 puntos de los 60 posibles. Estratosférico.

Las becerras del joven Jaime Guardiola también trataron de escaparse del pinchazo en el culo. Pero no sólo no lo consiguieron sino que casi le levantan la tostada a los jerezanos. Un punto impidió al sevillano asaltar los cielos de Vicos y todo por unas vacas mansas insolentes de pies ligeros y mal carácter que se embrocaron una y otra vez.

No es fácil galopar a cara de perro durante más de cuatrocientos metros con un palo de madera en el brazo derecho que puede llegar a pesar como un muerto cuando toca el momento de pinchar el tren trasero de una vaca de ochocientos kilos. Pero garrochistas como los de Vicos hacen que lo parezca, aunque hoy estén sufriendo en silencio el dolor de brazo, costillas y, lo que es peor, de orgullo.

CLASIFICACIÓN CAMPEONATO DE ANDALUCÍA DE ACOSO Y DERRIBO

Lugar: Cortijo de vicos

Oro: Juan Pedro Torres Rubiales (garrochista)

Domingo Flor Regordain (amparador).Total puntos: 57

Plata: Jaime Guardiola Villamaría (garrochista)

José Ramón Jiménez (amparador). Total puntos: 56

Bronce: Miguel Falcón (garrochista) Antonio de la Flor (amparador). Total puntos: 51