“Ponme una cerveza que no puedo más”. Fue esa la frase más repetida ayer en el Real de la Feria que soportó temperaturas cercanas a los treinta y cuatro grados. Sí, calor, mucho calor, que de una manera u otra se convirtió en la tónica general de una jornada, la del martes, que incentivó el consumo de cerveza, refresco y rebujito hasta cotas poco habituales. El vino, por contra, quedó eclipsado por bebidas algo más frescas.  

“Hoy hemos vendido sobre todo cerveza, supongo que será por esta calor tan mala que hace”, aseguraba uno de los camareros del cátering Juan Gómez de Lebrija, que regenta varias casetas en la Feria.  

Las horas puntas del calor se produjeron entre las cuatro y cinco de la tarde, cuando los termómetros alcanzaron los 33’9 grados, creando en el ambiente una situación de bochorno que obligaba a la gran mayoría de personas a refugiarse en zonas de sombra y en casetas con aire acondicionado, que en esta edición de la Feria del Caballo ha aumentado considerablemente. 

Es sin lugar a dudas uno de los cambios más significativos en esta Feria del siglo XXI, donde el confort y detalles como esos, más propios de un bar o restaurante, han desplazado hacia un lado a  aquellas de toda la vida en las que como máximo se recurría al clásico ventilador para pelear el bochorno. 

La presencia de climatizadores en el Real y la alta demanda producida como consecuencia de este inicio de semana tan caluroso, ha provocado que muchas empresas que se dedican al alquiler  de este tipo de aparatos se hayan quedado sin existencias. Cierto es que ha tenido que ver la cercanía de la Feria de El Puerto, donde también hubo una amplia demanda de solicitudes. “Los alquileres han ido aumentando en los últimos años, porque de tener dos o tres casetas hemos pasado a contar con quince, por lo menos”, explicaba ayer Elio Aguilocho, representante de la empresa EAP Reparaciones, quien confirmaba a este medio que debido a la alta demanda “hemos tenido que adquirir más material, porque ahora tenemos montajes en ferias como la de Marbella, Málaga y Los Barrios, que arranca ya”.

Hay que recordar que estos climatizadores funcionan como los que existen habitualmente en los hogares, sólo que están dirigidos por una maquinaria industrial. Además, sus frigorías dependen del número de metros que tenga cada caseta. Su precio oscila entre los 1.800 y 2.200 euros por su alquiler durante una semana.

Pero no sólo el típico climatizador se ha hecho su hueco en la Feria, donde también aparece el aire por condensación. Son máquinas que incorporan un depósito de agua y que enfrían con bastante eficacia, incluso con menor consumo que las anteriores. Éstas se pueden encontrar también en numerosas casetas y su coste es inferior al anterior.

Evidentemente, el calor propició que muchas personas tuvieran que ser atendidas por Cruz Roja y Proteccción Civil, que no obstante no hablaban de un número “fuera de lo común, ha sido lo normal cuando el calor aprieta, sobre cinco o seis”, apuntaba el coordinador de la caseta de Cruz Roja.

El mayor número de incidencias se produjo en la caseta del Mayor donde tres personas tuvieron que ser atendidas como consecuencias de bajadas de tensión y lipotimias. Todas las actuaciones se saldaron, afortunadamente, sin consecuencias. 

Pero esta situación empeorará en las jornadas de hoy y mañana, cuando, según las previsiones meteorológicas, pueden alcanzarse temperaturas cercanas a los 37 grados en el Real. El causante, la llegada de aire cálido y cargado de polvo procedente del Sáhara que ha convertido estos días de mayo en días, sobre todo a nivel térmico, similares a los del mes de agosto.   

Ante esta situación, Protección Civil y Cruz Roja han hecho públicas una serie de recomendaciones para las personas que visiten la Feria estos días. Así, entre las directrices a seguir están las de limitar la exposición al sol, sobre todo desde las dos a las seis de la tarde, ingerir comidas ligeras y regulares, ricas en agua y sales minerales, y fundamentalmente hidratarse de manera continua. También se recomienda vestirse con ropa de colores claros.