Bodegas

El Amontillado en Rama de Viña Santa Petronila se cuelga la plata en los Premios Verema 2022

  • El vino artesanal de la pequeña bodega de Macharnudo Bajo, segundo clasificado en la categoría de 'Mejor Generoso del Año'

  • Viña Santa Petronila, la bodega de vinos de Jerez más pequeña del mundo, ha sido la única con dos vinos nominados en esta categoría

  • Santa Petronila, cuando la tierra se expresa a través del vino

Botellas de Amontillado en Rama y Oloroso en Rama Santa Petronila, en una cata en la viña-bodega del mismo nombre.

Botellas de Amontillado en Rama y Oloroso en Rama Santa Petronila, en una cata en la viña-bodega del mismo nombre. / Miguel Ángel González

Un premio de gigante para la bodega de vinos de Jerez más pequeña del mundo. El Amontillado en Rama Santa Petronila se ha subido al segundo escalón del podio de los prestigiosos Premios Verema 2022 en la categoría de 'Mejor Vino Generoso del Año".

La bodega de la DO Jerez-Xérès-Sherry y Manzanilla-Sanlúcar de Barrameda destaca la importancia de un galardón que considera especial y que se otorga mediante votación de profesionales y aficionados al vino de toda España. que este año han emitido un total de 250.000 votos entre los nominados en las distintas categorías, superando la cifra de participación de la edición anterior.

Viña Santa Petronila subraya el éxito de esta medalla de plata en la categoría de vinos generosos, en la que esta bodega jerezana ha sido la única con dos nominados: Amontillado en Rama como segundo clasificado y Oloroso en Rama, entre los que se han dividido los votos de "los amantes de los vinos de esta viña".

Desde Santa Petronila destacan el "gran honor" que representa para una bodega tan pequeña, con sólo cuatro vinos en el mercado y de producciones muy limitadas, tener dos nominados en los Premios Verema, "fruto del esmero en esas cepas viejas de la viña que da nombre a nuestros vinos".

El Amontillado en Rama Santa Petronila es el resultado de un envejecimiento que sigue el genuino proceso de soleras y criaderas de Jerez, incorporando algo que durante años se olvidó en parte: el origen de lo que se introduce en dichas criaderas. "Como decimos con nuestro amigo y maestro, Rafael Garcia, el envejecimiento del vino generoso llegará hasta donde le permita la uva de donde provenga".

En el caso de Viña Santa Petronila, señala la bodega en un comunicado, este proceso consiste en "dejar que nuestras cepas de casi medio siglo se desarrollen en la albariza de Macharnudo Bajo, con las barbas del salino lago Ligustino surcando bajo ella, y hasta no hace tanto sumergida en el mar, con muy baja producción por cepa para obtener una uva sápida, con elevada graduación de forma natural, vendimia manual y esmerado trato en el viñedo".

El Amontillado Santa Petronila, proviene de un doble envejecimiento: por un lado, biológico, del mosto de prensa ligera que con la fermentación natural permite expresarse a la uva Palomino, dejando paso a la flor que emerge a sus anchas en la pequeña bodega situada en el viñedo. Tras la mitad de su crianza bajo velo de flor, se da paso de forma artesanal a una larga crianza oxidativa, para obtener la sapidez, armonía, elegancia y a la vez complejidad del Amontillado en Rama Santa Petronila.

"Nuestros cuatro vinos generosos, siguen el mismo patrón: uvas de cepas viejas de Santa Petronila para que, pasados años de envejecimiento, su origen dé lugar a la armonía de los sentidos, en Rama; sin filtrados, ni clarificados, que sustraigan naturaleza a un vino natural".

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