A pocos días de celebrarse la Asamblea de la Comunidad de Regantes del Guadalcacín, donde saldrá elegida su nueva Junta de Gobierno, la Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos -COAG- de Cádiz, que avala una de las dos candidaturas que se presentan a estas elecciones, la encabezada por Jacinto Carrasco, explica con detalle y datos por qué piden a los regantes la renovación en los puestos de responsabilidad de la Comunidad y el motivo por el que se niegan en rotundo a mantener a la actual junta directiva más tiempo a cargo de la institución.

Traición y saqueo. Palabras duras pero reales. Porque traicionados y saqueados se sienten los regantes que hace ya bastantes años pusieron su total confianza en manos de los que llevaban las riendas de la Comunidad, en pro de un proyecto de modernización que, a priori, posibilitaría más ahorro y contención con respecto al uso del agua y daría un futuro más cierto al excelente campo de regadío de la comarca jerezana.

Treinta y nueve millones de euros era el coste neto de un proyecto de modernización que aprobaron los regantes en su día. Todos los regantes estuvieron de acuerdo en este punto. Años después, el coste total de la modernización, con casi 4.000 rectificaciones de las que los regantes no reciben información, sobrepasa los ochenta millones de euros. Confianza traicionada y el doble de dinero al que hacer frente.

"Porque no hay que olvidar, que además de las ayudas recibidas, son los regantes los que están hipotecados para el resto de sus vidas e, incluso, la deuda la heredarán sus hijos. Porque habrá que pagar durante 50 años mucho más dinero del que en principio se aprobó", comenta Miguel Pérez, secretario provincial de COAG Cádiz.

Para esta organización agraria, esto es la punta de un iceberg que, cada día que pasa, y sin tener ni siquiera acceso a los datos de la Comunidad, va mostrando una base enorme de irregularidades que distan mucho del interés general de los regantes, que era la justificación oficial e inicial de esta importante inversión.

"El proyecto se sobredimensionó, por ejemplo, -dice Pérez-, instalando el triple de bombas impulsoras de las que necesitaba la zona regable, con el consiguiente aumento de capacidad de la red en tierras que lindan con el perímetro de la Comunidad. Se han gastado muchísimos millones en esta acción no justificada y, sin embargo, han dejado a zonas que son el corazón de la zona regable con las tuberías antiguas".

"Éstos son hechos irrefutables-continúa-. Y nadie responde a esta barbaridad. Desde COAG no vamos a permitir que a los regantes de toda la vida se les endose una deuda durante medio siglo por beneficiar a algunos que no han regado en su vida. Y exigimos responsabilidades por lo sucedido. Nosotros no queremos tapar ni olvidar lo sucedido, porque además del engaño, a los regantes todo esto les toca el bolsillo, que ya bastante castigado está con la crisis que sufre el sector".

Votos ficticios

Aún hay más en toda esta rocambolesca historia que, desgraciadamente, les ha tocado vivir a los regantes del Guadalcacín. El intento de manipulación del resultado electoral es de auténtico escándalo. La imperiosa necesidad de continuar manejando la Comunidad llevó a la junta directiva a presentar un censo irregular donde se multiplicaban los votos de los interesados en mantener el 'status quo' en la institución.

COAG lo denunció y la Agencia Andaluza del Agua suspendió las elecciones solicitando la rectificación del censo. Meses después, se ha convocado de nuevo la asamblea pero, según ha podido comprobar y denunciar esta organización, el censo continúa con ilegalidades que multiplican los votos que favorecen a los que quieren seguir manejando la comunidad.

Por este motivo, COAG se ha dirigido de nuevo a la Agencia Andaluza del Agua instando a ésta a que intervenga por vía de urgencia e imponga medidas coercitivas, declarando nulos los votos irregulares, "tal y como propuso hace unos meses el propio Cristóbal Cantos, secretario provincial de Asaja-, en este mismo medio el pasado 3 de diciembre, cuando manifestó que 'lo lógico sería dejar sin voto a las explotaciones dudosas".

Así las cosas, desde COAG se espera que, gracias a la intermediación de la autoridad competente, que tendrá que dar respuesta a la denuncia ya formulada por la organización agraria, las elecciones de la Comunidad de Regantes se puedan celebrar de manera limpia, sin trampas y respetando la voluntad de los regantes.