Jerez

Viñistas y bodegas discrepan en sus previsiones de cosecha

  • Asevi apunta a una considerable merma por los efectos del calor, mientras Fedejerez cree que la producción final aumentará entre un 10 y un 20 por ciento

No exenta de dificultades por los muchos problemas que afectan al Marco de Jerez, la vendimia de 2009 alcanza velocidad de crucero tras la entrada en funcionamiento de dos tercios de los lagares inscritos en el Consejo Regulador, en concreto 24 de 38 en los que según el último parte de la institución del vino ya se han molturado casi 26,7 millones de kilos de uva.

Con la campaña de recolección ya generalizada, las organizaciones sectoriales ajustan sus estimaciones de cosecha con resultados muy dispares, que oscilan entre la merma de entorno a un 20 por ciento a la que apunta Asevi-Asaja y el aumento de entre un 10 y un 20% al que señala la patronal bodeguera Fedejerez, que se traducirían en producciones finales de unos 75 millones de kilos en el primero de los casos y de 120 millones, en el segundo.

Por los datos de algunas viñas del en las que ya prácticamente se da por finalizada la campaña, los viñistas independientes sostienen que en algunos pagos de interior se perderá hasta un 25% de la cosecha, caída que paliarán en parte las viñas de costa, en las que predominan temperaturas más suaves y el rocío contribuye a suavizar la pérdida de peso registrada hasta la fecha por la incidencia del clima sobre el cultivo.

Desde esta perspectiva, el presidente de Asevi-Asaja, Francisco Guerrero, subrayó ayer que la campaña está siendo “mala” para los intereses del viticultor por la “importante merma”, sin que además vaya a beneficiarse de la subida de grado de la uva.

Y es que la persistencia de las altas temperaturas y los vientos de levante están marcando las primeras semanas de campaña, en las que la graduación de la uva se ha disparado hasta los 11,96 baumé, con puntas de hasta 12,69 grados. Lo que en condiciones normales habría supuesto un considerable ahorro en el proceso de fortificación –añadido de alcohol– de los vinos de Jerez se convierte, sin embargo, en un problema añadido por la crisis que arrastra el sector.

Frente a la previsión a la baja de los viñistas independientes, las estimaciones de la patronal bodeguera a falta aún de los primeros aforos apuntan a un aumento con mayor incidencia en las viñas de cooperativas y de las costas que en las del interior bajo titularidad de las bodegas.

Según explicó el director de la patronal bodeguera, Bosco Torremocha, “el calor ha reducido en algo la producción, pero no tanto, porque hay más uva y más caldo”, si bien puntualizó que, desde el punto de vista sectorial y empresarial, el aumento de producción en nada beneficia, ya que unido a los excedentes acumulados, agravan aún más si cabe la difícil situación que atraviesa el Marco.

Por otra parte, Torremocha se refirió a la calidad excepcional de la cosecha, “como la de pocos años”, al tiempo que aludió entre los efectos del clima a la elevada graduación de la uva como algo inusual en los últimos años –para la recolección de la uva con destino a la elaboración de vinos de Jerez se requiere un mínimo de 10,5 grados baumé, dos puntos por debajo de la máxima alcanzada esta campaña–.

Para la patronal bodeguera, que como el resto de organizaciones firmantes del acuerdo sectorial –Asevi y Aecovi– ratificado por el pleno del Consejo con la adhesión de los dos vocales expulsados de Coag sigue esperando una respuesta de la Junta a la solicitud de ayudas públicas urgentes, la vendimia está ya generalizada, con todos los lagares del interior operativos, y el cierre de campaña se producirá a mediados de mes, sobre el día 12.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios