La Junta de Andalucía prevé que a lo largo del segundo semestre de este año pueda iniciar el proceso de contratación de las obras para que el antiguamente denominado Centro de Innovación del Vino, un edificio situado en el Parque Tecnológico Agroalimentario, albergue el Laboratorio Agroalimentario y la Estación Enológica de Jerez, ubicadas actualmente en la calle Córdoba.

De este modo se dará uso a un edificio que lleva más de una década construido y que en un inicio se pensó que fuera un referente en la investigación de productos vitivinícolas. Al final, será un inmueble al que se trasladarán unos servicios ya existentes aprovechando que en un edificio anexo ya está operativo el Laboratorio de Producción y Sanidad Animal.

Ahora bien, la Consejería de Agricultura enmarca este traslado dentro de un “programa de trabajo” para modernizar los laboratorios de control de la Junta, una encomienda que está en manos de la Agencia de Gestión Agraria y Pesquera de Andalucía (Agapa). En un comunicado emitido este miércoles, el organismo autonómico sostiene que se está procediendo a integrar los distintos laboratorios uno por provincia con el objetivo de “optimizar el gasto público” y “mejorar la gestión del presupuesto”. Esto ya se ha realizado en Sevilla y Huelva.

De este modo, se le dará uso a un edificio de propiedad municipal, que ha sido cedido por el Ayuntamiento a la Junta mediante una mutación demanial, y que actualmente no está terminado de construir. De hecho, este inmueble fue una de las ‘víctimas’ de los fondos que tuvo que devolver la sociedad pública Parque Agroalimentario de Jerez SA, una mercantil participada por el Estado, la Junta y el Ayuntamiento que acabó liquidándose por imposibilidad de concluir los proyectos en los que se había embarcado a finales de la primera década de este siglo. Tras numerosos trámites burocráticos, y aparición de cargas de última hora, el edificio pudo revertir al Ayuntamiento en 2022 para, acto seguido, iniciar el procedimiento para cedérselo a la Junta.

Eso sí, los planes iniciales ya eran en ese momento diferentes a la idea original. Así, el inicio se concibió en un inicio como un centro que sería gestionado por la Universidad de Cádiz para que fuera un gran laboratorio para el desarrollo de proyectos de investigación sobre el vino y su posterior transferencia a la empresa privada. Sin embargo, aquel proyecto no pasó del boceto ya que, cuando se fue a firmar el acuerdo, la sociedad que gestionaba el PTA entró en concurso de acreedores.

A día de hoy, el edificio, de cuatro plantas y con una superficie construida de más de 3.200 metros cuadrados, permanece inacabado. De hecho, las obras que pretende acometer la Junta en el segundo semestre del año consisten en adecuar su interior para que puedan albergar los usos administrativos y los laboratorios de las dependencias que se trasladarán a este edificio. En el comunicado emitido por la Consejería de Agricultura, no aclara si el Laboratorio de Producción y Sanidad Animal, que ya se encuentra en el PTA, se trasladará a este edificio o continuará en su actual ubicación que, precisamente, está al lado de este inmueble.

El proyecto de obras tendrá un coste de unos 2,6 millones de euros, que se financiarán con fondos europeos. El plazo de ejecución es de ocho meses.