Una fábrica de artistas que cumple un siglo de historia
La comunidad educativa y el alumnado de este centro singular afrontan los retos del futuro después de haber podido duplicar su espacio en un convento de 1636
La Escuela de Artes Plásticas y Diseño ha estado durante todo este año de celebración, ya que ha cumplido un siglo de existencia y con este motivo se han venido desarrollando durante los últimos meses un amplio abanico de actividades en el que la 'guinda' ha sido la exposición de obras realizadas por profesores y alumnos antiguos y actuales o también un pase de los modelos diseñados por los estudiantes de Modelismo de indumentaria. No cabe duda de la peculiaridad de este centro, ya que tanto sus profesores como sus alumnos son artistas.
El director de la escuela, Domingo Martínez, cree que uno de los principales valores de este centro es "la cantidad y calidad de los proyectos que hemos emprendido, tanto de carácter artístico como cultural y patrimonial. Prueba de ello son los actos conmemorativos del centenario y la implicación en programas europeos y formación en centros de trabajo, así como la relación con otras escuelas regionales, nacionales y europeas". Ahora mismo una de sus principales preocupaciones es "adecuar estas instalaciones a las demandas actuales, a los avances tecnológicos y reformar las infraestructuras para convertir este edificio, un antiguo convento de 1636 en un espacio educativo capaz de albergar enseñanzas artísticas a nivel adecuado".
En este sentido recuerda que hasta enero de 2005 estuvieron compartiendo edificio (cada uno ocupaba una mitad y tenían dos entradas diferentes) con la entonces Escuela de Empresariales, pero cuando dicho centro se trasladó al campus universitario de La Asunción, pasaron de tener 1.200 a 5.000 metros cuadrados y poco a poco están realizando el proceso de adaptación, "aunque todavía tenemos que acometer las importantes reformas que tanto las aulas como los talleres necesitan".
En cuanto a la oferta extraescolar, explica que "el departamento de Extensión Cultural y Promoción Artística coordina una importante cantidad de actividades complementarias y extraescolares y participamos en una gran cantidad de eventos y exposiciones".
Dado el amplio abanico formativo que ofrece dentro de las Artes Plásticas y el diseño, sus alumnos proceden no sólo de Jerez, sino también de muchas localidades de la comarca como Chipiona, Sanlúcar, Rota, Lebrija, Trebujena, Arcos, Algodonales, Villamartín, El Puerto, Barbate, San Fernando... y eso hace que sea variopinto y con distintos intereses y nivel formativo". En cuanto al profesorado, explica que "es joven en general y cada vez más estable, concretamente casi la mitad de la plantilla tras las últimas convocatorias de oposiciones de las especialidades de Artes Plásticas y Diseño y los últimos concursos de traslados y ofertas de vacantes". Sobre la relación del centro con la Junta de Andalucía, de quien depende orgánicamente, dice que "es directa y cercana. Ellos son conscientes de las mejoras que necesitamos y debemos lograr que se optimicen los espacios y recursos para conseguir una mayor operatividad y funcionalidad". En este sentido señala que "las jornadas regionales de Escuelas de Arte que comenzamos en Jerez hace varios años con la Consejería de Educación han servido para poner en común muchas de las aspiraciones y estrategias a seguir por nuestros centros y muestra de ello son, por ejemplo, los premios extraordinarios de Artes Plásticas y Diseño o las prácticas en centros de trabajo en Europa. Ahora se debe crear el Instituto Andaluz de Enseñanzas Artísticas Superiores, con la esperanza de la implantación en Andalucía de los estudios superiores de Diseño". No obstante, el secretario del centro, Luis de Soto, pediría "que la Administración se acuerde más de las escuelas de arte, porque somos el hermano pobre de la enseñanza en Andalucía. Somos lo último de lo último". En la actualidad el centro tiene algunos proyectos pendientes como la Fundación Luis Pernía, "una iniciativa que se proyectó con la intención de facilitar la colaboración externa y de contar con el mecenazgo de la creación artística y la difusión de artistas emergentes".
En definitiva, considera que "dirigir una institución centenaria como la Escuela de Artes Plásticas y Diseño de Jerez supone analizar la creación artística y el ejercicio docente en el entorno y atreverse a apostar por procedimientos y conceptos que traspasan los límites cotidianos y reclaman transformaciones de vanguardia".
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