En torno a 40 proyectos de plantas fotovoltaicas están proyectados o se tramitan en el término municipal jerezano en la actualidad. Los datos fueron apuntados este jueves por el concejal de Urbanismo, José Antonio Díaz, durante un pleno municipal donde, entre otros asuntos, se abordó el respaldo del Ayuntamiento de Jerez a una iniciativa legislativa municipal que ya se tramita en el Parlamento andaluz por la plataforma Aliente para que se apruebe una moratoria y se inicie un planificación para redistribuir la implantación de este tipo de instalaciones. La propuesta fue presentada por el grupo Ganemos Jerez. 

La propuesta se abordó en el turno de urgencias ya que el Ayuntamiento tiene hasta principios del próximo mes para adherirse a esta propuesta con la que se pretende poner freno a la regulación de este tipo de plantas generadoras de energía eléctrica. Salió adelante con los votos favorables del PSOE y de los concejales de Ganemos Jerez, Kika González, y de Izquierda Unida, Raúl Ruiz-Berdejo. Mientras, los representantes de PP y Ciudadanos se abstuvieron.  

Durante su intervención, el edil de Urbanismo negó que el Ayuntamiento tenga herramientas para poder impedir la implantación de plantas fotovoltaicas y eólicas salvo por lo que venga regulado en el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) y en el Plan Especial de Ordenación de Infraestructuras eólicas del término municipal de Jerez. Incluso, aseguró que, a día de hoy, no tiene conocimiento “oficial” del número de plantas de generación de energía renovable que la Junta de Andalucía tramita en el término municipal. Ahora bien, acto seguido señaló que de manera extraoficial les han comentado que podrían ser “unas 40”. 

Actualmente, y según los datos manejados por este medio, dos instalaciones solares están ya operativas. Estas se encuentran situadas en la Finca Las Quinientas y en el Cortijo de Frías, ambas en el extremo sureste del término municipal. Mientras, otras dos se encuentran en construcción (las de Malabrigo y Las Majadillas, ambas en la carretera de La Barca, cuyas obras concluirán este año). Ocho proyectos (las cinco de Repsol en Torrecera y las tres promovidas por el fondo de inversión A&G) ya cuentan con licencia municipal y ultiman la declaración de utilidad pública (la figura que le permite la ocupación de los terrenos que requieran para la construcción de sus infraestructuras). 

Por otro lado, cinco ya cuentan con el beneplácito autonómico. Son concretamente dos proyectadas en las cercanías de la barriada rural de Mesas de Asta (una promovida por una firma malagueña y otra por un grupo de capital lituano), otra de A&G en el paraje de Isletes Bajos, una junto al núcleo de Polila y otra promovida por Endesa en las faldas de la Sierra de Gibalbín.  

Mientras tanto, hay otros 12 proyectos que han estado en exposición pública en el último año y que están a la espera de la autorización administrativa previa de la Junta de Andalucía, aunque alguna de ellas ya ha superado la tramitación ambiental. Los proyectos se contemplan en enclaves como Cuartillos, la Carretera de Sanlúcar, la antigua N-IV o el entorno de Montecastillo. A estas, según las estimaciones dadas a conocer por el gobierno local, se habrían sumado otra decena.  

De este modo, con la proposición aprobada en el pleno, el Ayuntamiento de Jerez se adhiere a la petición de la plataforma Aliente que reclama una “mayor y mejor concreción” de la planificación de este tipo de instalaciones, así como criterios para hacer un uso racional del territorio y de los recursos naturales. La adhesión ya se llevó a un pleno celebrado a final de año y, aunque obtuvo más síes que noes, el Ayuntamiento no pudo adherirse a la iniciativa legislativa ya que requería de la mayoría absoluta de la corporación (el PP votó en contra y Ciudadanos se abstuvo). Ahora, una vez que se ha iniciado la tramitación parlamentaria, el Consistorio sí puede respaldarla ya que en este caso no necesita de los 14 votos del pleno.

De izquierda a derecha, Laura Álvarez, Mamen Sánchez y José Antonio Díaz.

 “Una, dos o tres, sí; 40, no” 

Durante el debate de la propuesta, Kika González defendió la propuesta señalando que es una oportunidad para frenar temporalmente y “ordenar” la proliferación de estas plantas. Asimismo, incidió en que esta permitirá hacer frente a proyectos como el parque eólico de El Barroso, que actualmente se encuentra en construcción a pesar de estar en una zona de viñedos del Marco de Jerez.  

Por su parte, el delegado de Urbanismo alegó que el Ayuntamiento no tiene competencias para evitar la implantación de este tipo de instalaciones y calificó de “barbaridad” que se proyecten en Jerez en torno a 40 plantas fotovoltaicas. Así, en respuesta al portavoz del PP, Jaime Espinar, quien le reprochó al gobierno municipal que tiempo atrás aplaudiera el aterrizaje de este tipo de proyectos y ahora apoye la iniciativa legislativa que reclama una moratoria, Díaz comentó que son partidarios de una “distribución más homogénea y repartida” de estas plantas. “Una cosa son una, dos, tres o cuatro plantas; no 40”.