Los trabajadores de la empresa concesionaria de los autobuses urbanos, Urbanos Amarillos, decidieron ayer retrasar de nuevo, hasta el próximo día 6, la decisión sobre la huelga que tenían convocada desde el pasado día 25 hasta el día 1 de julio. Este aplazamiento se acordó tras la reunión celebrada en el Sistema Extrajudicial de Resolución de Conflictos Laborales en Andalucía (Sercla). En esta reunión, el Ayuntamiento aseguró que el día 6 abonará la nómina del pasado mes de abril. El próximo viernes se celebrará otra reunión en el Sercla y si en esa fecha no han cobrado todavía la nómina de abril, convocarán de nuevo la huelga desde el próximo día 8 hasta el 1 de julio.

El portavoz del comité de empresa, Ángel Morales, resaltó asimismo que, "aunque el asunto más importante es el pago de la nómina, también se están incumpliendo varios artículos del convenio colectivo como la entrega de moneda fraccionaria a los conductores para que puedan devolver el cambio a los usuarios, la creación de un fondo de necesidad del personal (consistente en una bolsa para conceder préstamos a unos veinte trabajadores) y la puesta en marcha de un comité de seguridad y salud laboral".

Por otra parte, Morales recuerda que la anterior concesionaria, Cojetusa, les debe todavía la nómina de octubre, once días de noviembre y la paga extra de Navidad. En este sentido, señala que la delegada municipal de Movilidad, María del Carmen Martínez, "se comprometió a abonar a Cojetusa la nómina de octubre en las últimas semanas de noviembre, pero aún no nos han pagado, así que de la anterior concesionaria le deben a cada trabajador unos 4.000 ó 5.000 euros".

También señala que "la nómina de febrero se abonó un mes y siete días tarde y el mes marzo se pagó el 15 de abril. Es una dinámica que venimos arrastrando desde hace dos años, antes con la antigua concesionaria y ahora con la actual, así que si no cobramos, no trabajamos".