La huelga general tuvo una incidencia mediana en el sector de la educación ya que, aunque si bien el número de profesores que siguieron la convocatoria fue más bien escaso, los alumnos que dejaron de asistir a clase fueron, proporcionalmente, muchos más. Comenzando por los concertados, en el colegio Jesús María de La Asunción por ejemplo sólo faltó uno de 26 profesores, y el porcentaje de alumnos que se quedó en casa fue de un tercio largo según el director. En El Cuco faltaron tres de 64; en Infantil y Primaria se quedaron en casa muy pocos niños pero en Secundaria faltó alrededor del 55% y en Bachillerato un 85%. Tampoco hubo ningún profesor de huelga en el colegio de San José pero sí se quedó en casa la mitad de los niños.

Algo mayor fue la incidencia en los colegios públicos. Así, en el Al-Ándalus por ejemplo hicieron huelga seis profesores de quince y faltó alrededor de un tercio del alumnado.

En el Alfonso X El Sabio hicieron huelga dos de 25y faltó la mitad de los alumnos. Asimismo, en el Andrés de Ribera sólo hicieron huelga tres de 21 y sólo fueron a clase unos treinta de 220.

En los centros de Secundaria fueron muchísimos más los alumnos que faltaron a clase. Así, en el instituto Almunia siguieron la huelga 16 profesores de 68 pero el noventa por ciento del alumnado se quedó en casa. En el Álvar Núñez siguieron la huelga cinco profesores de 49. En cuanto a los alumnos, faltó el 85 por ciento del segundo ciclo de Secundaria y bachillerato y sólo el veinte por ciento del primer ciclo de Secundaria. En el Asta Regia el seguimiento de la huelga fue bastante mayor: treinta profesores de 67 y faltó un 95% de los alumnos.

No obstante, hay que decir que tanto en los colegios como en los institutos los alumnos que fueron a clase fueron atendidos por profesores de guardia.

En el campus universitario de La Asunción también se notó bastante la convocatoria de huelga porque tanto la secretaría como la cafetería y otros servicios comunes estuvieron cerrados. En toda la Universidad de Cádiz se mantuvo un servicio mínimo en sus centros académicos, con representación del equipo decanal y de la conserjería  y en los servicios centrales también se atendió lo más relevante como son mantenimiento, informática y seguridad.