"La mujer gitana no sólo sirve para bailar"

No es tarea fácil, pero ellas quieren intentarlo. En la mayoría de los casos, se lo impone la actual coyuntura económica. Y, por eso mismo, la mujer gitana ha de debatirse entre el rol que el grupo de pertenencia espera que desempeñe y el estatus que ella confía conseguir dentro de una sociedad que le ofrece otras posibilidades.

Hoy día, las mujeres gitanas alzan la voz; eso sí, sin desprenderse de la atenta mirada masculina que tanto pesa en esta etnia. Para ello, recurren a la asociaciones que trabajan en favor de y para la mujer gitana luchando por la promoción integral de todas las mujeres. Una de las más veteranas es la Fundación del Secretariado Gitano y su coordinadora provincial es Cristina Flores, una mujer no gitana pero nacida en Jerez.

-¿Se ha acabado ya con el tópico de que la mujer gitana sólo vale para bailar y cantar?

- Eso es un tópico ya en desecho, sobre todo en la ciudad en la que vivimos. La gitana no sólo sabe de éso. Partimos de la base de que Jerez es distinto del resto de localidades y provincias, los gitanos del País Vasco, por ejemplo, no tienen nada que ver con los de Andalucía. Es un tópico que ahí está, pero yo conozco a gitanas que no saben ni bailar ni cantar. También puede hacer otras muchas cosas y eso es además un elemento de cambio para la evolución de la comunidad gitana.

-¿Conoce a gitanas en puestos de responsabilidad?

- Estas mujeres están cada día cogiendo más terreno. Con nuestro programa de empleo, la mayor parte de iniciativas que mueven las personas gitanas en el tema del autoempleo son de mujeres. Ellas son las que llevan la gran iniciativa.

-¿Qué tipo de empleo eligen?

- Tenemos gitanas maestras, azafatas... Hemos hecho además un taller relacionado con la atención al cliente y el setenta por ciento de las personas que se formaron eran mujeres gitanas. Dentro de nuestra base de datos, tenemos gitanas trabajadoras sociales prácticamente en todos los gremios. Hay sicólogas, las clásicas dependientas, de todo...

- Pero hay fuertes costumbres que le impiden salir a esa nueva realidad social que se impone.

- Siempre, las mujeres nos limitamos más al área de ámbito social, atención al cliente, más que a otros. Y, concretamente, la mujer gitana y aquí en Jerez, donde es completamente diferente al resto, ellas mismas tienen una necesidad e inquietud de salir de la casa, de formarse y hacer algo. Teniendo además en cuenta el momento de crisis. Son ahora precisamente ellas las que han de sacar la familia adelante, cuando una gran parte de los hombres vienen de la construcción, que es uno de los sectores más tocados por la crisis.

- Me pregunto si los hombres gitanos no dirán aquello de que estas mujeres 'van demasiado lejos'.

-Las mujeres gitanas son las que mandan en la casa, aunque parezca lo contrario, las que se encargan del cuidado de los hijos, de los mayores, del marido... Ellas son las que mueven el entorno familiar, quizás en un segundo plano. Se le ha dado un tirón de orejas al hombre y se le ha dicho que ellas también son válidas y pueden hacer un millón de cosas. Pero esto no es cuestión de meses, esto lleva mucho tiempo hasta que la mujer sale de su entorno y esté trabajando. Te puedo decir que en la fundación, hay una gran mayoría de mujeres las que tenemos del equipo gitano. El pasado 2011, del total de personas atendidas en el programa de empleo cerramos con una mayoría de mujeres, un 55 por ciento. Y del total de personas que atendemos, más del 60 por ciento han sido mujeres las que han sido contratadas. Son ellas las que han salido al mundo laboral. Y, además sin ningún miedo. Lo mismo se meten a limpiadoras o quizás donde ellas se encuentren más cómodas por su trayectoria. Se ven perfectamente válidas para afrontar ese trabajo.

-¿Existe aún algún tipo de discriminación cuando la mujer gitana busca un empleo?

- Hay una discriminación, que es encubierta, que no se dice abiertamente. Y nos hemos encontrado en la federación con casos en los que quizás no te lo dicen claramente porque eres gitano, sino con la manida frase de que 'no reúnes el perfil'. Aún existen unos prejuicios de la cultura gitana por falta de conocimientos de las personas no gitanas, que es lo que hace crear esas barrera y que las traten con cierta discriminación.

-¿La mujer gitana es una mujer moderna?

- Una cosa muy bonita que tiene la comunidad gitana es que ellos no pierden la identidad. Hagas lo que hagas, seguirán siendo gitanos. Con unas costumbres más arraigadas o menos, eso ya depende de la 'cuna' en la que se han movido y han crecido, pero ellas van a seguir manteniendo el vínculo familiar, van a mantener las costumbres a la hora de una celebración, el cuidado de los mayores... Eso no lo van a perder. Ese es el mérito que tienen, esa postura que, a pesar del entorno en el que se mueven, esa identidad cultural la van a llevar por bandera.

- Jerez es una ciudad donde la sociedad gitana está muy bien adaptada.

- Sí. Y pongo un ejemplo: Sobre todo, los matrimonios mixtos han propiciado una mezcla de gitanos y no gitanos. ¿Quién no va a coger y te dice que tiene un cuarterón, que tengo un poquito de mi abuela, de mi tatarabuela... Mucha de la población de Jerez la tiene. ¿Que hay muchos pasos más por hacer? Por supuesto, pero ya al menos hemos dado un avance con respecto a otras provincias que no lo han hecho.

-¿Qué conclusiones sacaron de las pasadas jornadas de la Mujer?

- En resumen, que la mujer gitana se está formando más, era esa la visión que queríamos dar; cada vez se preocupan más por tener una formación. Y mucho más que de los pequeños cursos, hablamos incluso de la Universidad. Cada vez hay más mujeres gitanas que están abarcando el mundo universitario y que hay que hacerlo visible, dar una imagen positiva de la mujer gitana. Y es muy importante la importancia que tiene la implicación de la familia para que realmente se llegue al objetivo cumplido en materia de estudios.

-¿Tienen algo de especial las mujeres gitanas?

- Yo les veo algo especial. Son personas muy luchadoras: Lo que se tiende a conseguir, van a por ello y luego llegan al éxito. Pueden con todo tipo de obstáculos y no se rinden a la primera por algún problema. Tratan muy bien a la familia, con mucho respeto. Eso es de admirar. Y de respetar.