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El ocho de diciembre, día de La Inmaculada, los restos de don Rafael Bellido Caro reposarán en la Catedral, tras su traslado desde el cementerio al primer templo que él fundó como primer obispo diocesano. Ayer se presentaron en el obispado los actos que la Iglesia local y la Asociación Rafael Bellido Caro, han preparado para celebrar este acontecimiento. El propio prelado, José Mazuelos, junto a Pepe castaño, Andrés Luis Cañadas, Miguel Puyol, Rafael flores y José Manuel Morales, como responsables de la entidad dedicada al primer obispo, ofrecieron detalles de lo que sucederá desde mañana mismo hasta el 15 de diciembre, día en el que finalizará el programa.
Monseñor Mazuelos afirmó que el traslado a la Catedral, " se estaba buscando tanto por este obispo como la propia Asociación porque pensamos que el primer obispo tenía que estar en su sede, su cátedra". Los restos serán depositados al pie de un altar, procedente de La Cartuja y conservado en la Catedral, presidido por una imagen de san Juan Grande, santo que fue instituido como Patrón de la diócesis por el propio Bellido y que tanto trabajó para que alcanzara su canonización.
Además, donde reposarán sus restos definitivamente está junto al altar dedicado a Juan Pablo II, pontífice que creó la diócesis y situó a don Rafael como su primer obispo. José Mazuelos no ocultó su satisfacción "por poder vivir estos momentos y agradecer a la familia que lo haya hecho posible". Sobre el programa conmemorativo del evento manifestó que ha sido diseñado con el objetivo de "dar a conocer su figura y al mismo tiempo para que su labor sea ampliamente conocida en un año tan especial como este de la Fe".
El presidente de la asociación Rafael Bellido recordó, como biógrafo de don Rafael, que quiso ser enterrado junto a su madre en el cementerio , " y esa última voluntad se va a seguir cumpliendo ya que estará junto a ella". Cañadas explicó el programa, que arranca mañana a las 20 horas con un acto público coordinado por él mismo en el obispado en el que, bajo el título ' una vida al servicio de los demás', se proyectaran imágenes de su trayectoria así como audios con manifestaciones del propio Bellido. El 22, a la misma hora y en el mismo lugar, segunda sesión consistente en una mesa redonda centrada en ' El pastor bueno visto por quienes le trataron', con la participación del canónigo hispalense José Luis Peinado, Antonio Ríos, ex presidente del Consejo de Cofradías de Sevilla, y Francisco Javier Florencio Bellido, sobrino de don Rafael.
El 29, la Academia de San Dionisio dedicará una sesión en su memoria con la participación de Sixto de la Calle, Antonio Murciano, José Rodríguez Carrión y Andrés Luis Cañadas. Tras estos previos se llegará al día de La Inmaculada, jornada en la que, tras la pontifical de la solemnidad en la Catedral, se procederá a inhumar los restos. El programa concluye el 15 de diciembre con un acto de especial calado, una misa flamenca, compuesta por Antonio Gallardo y cantada por Marismas. Don Rafael fue responsable de la Pastoral Gitana en la Conferencia Episcopal, además del constate apego que tuvo hacia esta etnia. El obispo Mazuelos concluyó con que "es de justicia que esté en la Catedral". Abundando en su personalidad, manifestó que fue "humilde y enamorado de los pobres, por eso quiso ser enterrado en el cementerio". El prelado jerezano apeló a la perpetuidad de su nombre para este traslado, "pese a que en el camposanto su tumba es reconocible, no queremos que se pierda su memoria por el paso del tiempo algo que no sucederá en la Catedral".
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