El 72% de la población soporta niveles de ruido aceptables

El 72% de la población de Jerez está expuesta a niveles de ruido iguales o inferiores a los que establece la normativa, es decir, 65 decibelios en horario diurno y 55 decibelios en horario nocturno.No obstante, debido a que la normativa es más restrictiva durante la noche, el porcentaje de población que soporta niveles aceptables de ruido en este último horario baja al 64%. Es una de las conclusiones del Mapa Estratégico de Ruido de Jerez, un documento diagnóstico sobre la situación acústica de la ciudad que ha sido elaborado por la empresa ‘dnota medioambiente, S.L’ en colaboración con el Ayuntamiento y que fue presentado ayer.

Los niveles de ruido son análogos a los de otras ciudades similares, según señalaron los representantes de la empresa que ha realizado el estudio, Santiago Núñez y Alberto Moreno, quienes matizaron incluso que son “bastante buenos y positivos en comparación con los registros de otras ciudades”.

Según el estudio, la principal fuente de ruido observada es el tráfico rodado y se centra principalmente en el periodo diurno. En cuanto a las zonas más expuestas a contaminación sonora procedente del tráfico son principalmente “la ronda de Circunvalación, Avenida Reina Sofía y otras como el Parque Empresarial (Distrito Norte), y Parque Empresarial Oeste”.

Respecto a los barrios que rodean el centro histórico como Santiago, San Pedro, San Miguel, Picadueñas Bajas y Puerta del Sur, el estudio concluye que presentan niveles de ruido elevados para el uso residencial, por lo que recomienda adoptar acciones encaminadas a mitigar la afección sonora con medidas orientadas al tráfico rodado tales como restricciones de velocidad, peatonalización de calles o cambio de asfaltados.

Las grandes infraestructuras como la A-4 o la AP-4 no suponen, según los responsables del estudio, un excesivo problema de ruido, al encontrarse alejadas del núcleo urbano “pero es importante tener en cuenta estas infraestructuras desde un punto de vista acústico en la ordenación del territorio y el crecimiento de la propia ciudad”. En cuanto al ruido debido al tráfico ferroviario afecta de forma mínima a una zona muy localizada dentro del municipio y claramente enmarcada a ambos lados de la vía del ferrocarril. Lo mismo ocurre con el ruido producido por las actividades industriales, muy localizadas en la periferia de núcleos poblacionales por lo que “la población afectada por dicha fuente de ruido es muy escasa”.

Además fruto de este estudio, se han propuesto y se han iniciado los trámites para la declaración como Zonas Acústicamente Saturadas (ZAS) de la calle San Pablo, la plaza del Clavo y Plaza Vargas, atendiendo a una demanda realizada por los vecinos. Al concentrar estos espacios numerosas actividades destinadas al uso de establecimientos públicos, los niveles de ruido ambiental producido tanto por las actividades como por las personas que las utilizan sobrepasan los objetivos de calidad acústica correspondientes al Área de Sensibilidad Acústica a la que pertenecen.

Durante la presentación del Mapa de Ruido, los responsables de la empresa expusieron la metodología, objetivos y contenido de los distintos estudios realizados, y explicaron que como paso previo, se ha zonificado la ciudad en diferentes áreas acústicas identificándolas con el uso de suelo, según sea residencial, industrial, sanitario o docente.

La elaboración del estudio comenzó a finales de 2014 y abarca los núcleos urbanos de Jerez, Guadalcacín, Estella del Marqués y La Barca. En una primera etapa se llevaron a cabo mediciones al objeto de evaluar el nivel de ruido de todo el municipio. Las mediciones en calles específicas han sido tanto de corta (15 minutos) como de larga duración (24 horas), las cuales han permitido determinar el comportamiento de las distintas tipologías de vías y detectar las principales fuentes generadoras de ruido, que en el caso del término municipal de Jerez, es, como se ha dicho, el tráfico rodado. En total se han realizado 550 mediciones de corta duración (325 en periodo diurno, 150 en horario de tarde y 75 de noche); las de larga duración han permitido registrar de manera continua las variaciones a lo largo de un día completo, y se han efectuado en 278 puntos repartidos por todo el núcleo urbano de la ciudad. Los responsables de la empresa destacaron, en este sentido, la colaboración que han tenido de los ciudadanos en todo momento para llevar a cabo todas las labores de mediciones.

Los trabajos realizados han incluido también un estudio sociológico que ha tenido como objeto analizar la molestia derivada del ruido entre la población. Para ello, se han realizado una serie de encuestas que han dado como principal resultado que un 39% de los encuestados considera la calle en la que viven “bastante ruidosa”, mientras que otro porcentaje similar cree que su calle es “poco o nada ruidosa”. Asimismo se realizaron ensayos de aislamiento de fachadas, con el resultado de que el 20% de las edificaciones muestreadas cumple con los niveles de aislamiento, mientras que el 80% restante que no cumple con las normativas actuales, muy restrictivas, según los autores del estudio, “son bastante buenas con respecto a las de otras ciudades y bastante receptivas a mejorar”.

El Mapa de Ruido permitirá la puesta en marcha de diferentes soluciones para la mejora de la calidad acústica de la ciudad. Para ello, se ha esbozado un plan de acción que contempla una serie de estrategias, diseñadas tanto a corto, medio o largo plazo, referidas a aspectos de planeamiento urbanístico, obras y edificación, infraestructura de transporte, actividades industriales y comerciales, actividades de ocio o relativas a otros servicios de gestión municipal.