Una vuelta más

El Circuito de Jerez santifica a su Pablo

  • El autor ensalza la figura de Pablo Fernández Salado, distinguido con el Premio del Motor Ciudad de Jerez, por una vida sacrificada para que las 112 hectáreas del Circuito brillen como oro en paño

Dicen que no hay nadie imprescindible. Por muy curioso que resulte, ese mérito suelen atribuírselo a la empresa, entidad o institución y no al trabajador, pues se considera que éste cumple con su función por un tiempo determinado y después hay otro que le sustituye. Así de simple, no hay más cera que la que arde. Ya lo cantó Julio Iglesias en una canción: “Al final, las obras quedan las gentes se van. Otros que vienen las continuaran, la vida sigue igual“. ¿Qué triste, no? Pero mira tú por donde, algunas veces se rompe esa despótica norma no escrita y se hace justicia, reconociendo la irremplazable valía de héroes, aparentemente anónimos, como Pablo Fernández Salado, al que se le ha otorgado el Premio del Motor Ciudad de Jerez 2022, una distinción más que merecida por este jefe de mantenimiento del trazado andaluz, al que Marc Márquez llama ‘Shérif de Jerez’. Con eso está casi todo dicho.

Marc celebró los 60 de Pablo. Marc celebró los 60 de Pablo.

Marc celebró los 60 de Pablo.

En 2016 publiqué un artículo titulado ‘30 años ganando con motor humano’, en el que destacaba a los grandiosos ‘duendes’ invisibles del circuito jerezano que nunca suben al podio, pero son los que garantizan su éxito. Como es lógico, ensalcé la figura de Pablo que, en una larga conversación, me dijo algo que hasta hoy no había visto la luz y viene como anillo al dedo para confirmar de quién estamos hablando: “El Circuito de Jerez, más que un trabajo, es una forma de ser y de vivir. Debes anteponer tu pasión y cariño hacia él por encima de todo, pues hay momentos de tanta exigencia que, sin ese amor, no te permitiría seguir vivo. A nivel laboral la dedicación es altísima, antepones el Circuito a la familia. Podría asegurar que mi mujer -Maribel- apenas me ve y mis hijos -Alba y Christian- casi nacieron en el trazado, porque antes trabajaba todos los días y sin fines de semana libres Yo no iba a verlos, sino que venían ellos para estar un ratito con su padre. Cuando comencé a trabajar en el Ayuntamiento lo hice en Infraestructuras, pero me venía a menudo para ver la construcción del trazado. Los guardias de seguridad me echaban y yo entraba por otro sitio. Estaba recién casado y le decía a mi esposa que sería un sueño trabajar aquí. Un día me encargaron construir los puentes metálicos para la Fórmula 1 y, a partir de ahí, me hicieron la propuesta de quedarme. El tiempo ha volado”. Sus ilustres canas y la jubilación a la vista le delatan.

Pablo, Maribel, Alba y Cristian. Pablo, Maribel, Alba y Cristian.

Pablo, Maribel, Alba y Cristian.

En el departamento de mantenimiento que dirige el incombustible y ahora premiado Pablo, hay 4 personas para innumerables actividades en unas instalaciones que abarcan 112 hectáreas de terreno que hay que cuidar a diario, desde la jardinería, limpieza, pintura, electricidad y un sin fin de menesteres. “No conozco a otro igual”, dice de él Carmelo Ezpeleta, máximo responsable del Mundial de MotoGP. Hablamos por tanto de un auténtico ‘hombre orquesta’, que podría escribir libros con sus innumerables experiencias. Como muestra, él no no olvida “una ocasión en que se inundó de barro y agua todo el Circuito. Trabajamos durante toda la madrugada para que al día siguiente hubiese carrera. También recuerdo que en 1990 ocurrió el grave accidente de Martin Donnelly y la dirección del Gran Premio de Fórmula 1 nos obligó a cubrir con neumáticos toda la zona de escapatoria donde se estrelló el piloto contra el guardarraíl. Para evitar que se suspendiera, nos movilizamos hasta encontrar 9.000 neumáticos entre Sevilla y Cádiz. Algunos querían cobrarlos, pero los conseguimos gratis. Aquel día nadie durmió, pero hubo carrera”. Camina o revienta.

Carmelo Ezpeleta y Pablo Fernández. Carmelo Ezpeleta y Pablo Fernández.

Carmelo Ezpeleta y Pablo Fernández.

"En reconocimiento a su aportación individual al mundo del motor y la contribución al prestigio del Circuito de Jerez” es la leyenda que reza en el Premio del Motor Ciudad de Jerez que la Alcaldesa Mamen Sánchez ha entregado a Pablo Fernández, pero quizá debieron ampliarla con la inmejorable cita del dramaturgo y poeta alemán Bertolt Brecht: “Hay hombres que luchan un día y son buenos. Hay otros que luchan un año y son mejores. Hay quienes luchan muchos años, y son muy buenos. Pero los hay que luchan toda la vida, esos son los imprescindibles". Sin discusión, así es y, de hecho, con este merecido Premio, el Circuito de Jerez santifica a su Pablo, porque aunque afortunadamente no sea mártir, su vida le ha entregado…

(*) Jesús Benítez, periodista y escritor, fue Editor Jefe del Diario Marca y, durante más de una década, siguió todos los grandes premios del Mundial de Motociclismo. A comienzos de los 90, ejerció varios años como Jefe de Prensa del Circuito de Jerez.

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