El Ayuntamiento de El Puerto ha renunciado a una subvención de 215.000 euros procedente del estado y tramitada por la Junta de Andalucía, cuya finalidad era participar en un proyecto piloto de itinerarios de inclusión social.

Fue el pasado mes de julio cuando el Ayuntamiento solicitó esta subvención, teniendo conocimiento de ella a través de una comunicación dirigida por la Consejería de Igualdad, Políticas y conciliación. Se trata de unas subvenciones del Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones en el ámbito de la inclusión social, por un importe total de 102.036.066 euros, en el marco del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia.

La Consejería de Igualdad, Políticas Sociales y Conciliación estaba inmersa, por su parte, en el diseño de un proyecto piloto para la puesta en marcha de itinerarios de inclusión social destinados a unidades familiares en situación de vulnerabilidad y exclusión social, y que tienen a su cargo a menores en situación de absentismo. El Ayuntamiento portuense mostró su interés por participar en el desarrollo del proyecto por el valor social y educativo que conllevaba.

Tras esta solicitud, y según la resolución de la Dirección General de Protección Social y Barriadas de Actuación preferente, al Ayuntamiento portuense le correspondía una subvención por importe de 377.042,16 euros.

El pasado 10 de enero se producía el ingreso en las arcas municipales de una cantidad de 215.555 euros, correspondientes al pago de la subvención finalmente concedida.

No obstante, este dinero tendrá que ser devuelto debido a la renuncia municipal a participar finalmente en el proyecto, cuestión que se explica en un escrito remitido por parte del Ayuntamiento a la Junta de Andalucía.

En el escrito se alega que el Ayuntamiento no puede participar en el programa debido “a la exigencia de la propia metodología y la rigidez del calendario, que hay que cumplir al pie de la letra”.

También se alude a “la brevedad de los plazos de respuesta que se exigen” y a “la ausencia de un margen suficiente para poder llegar a las exigencias temporales del proyecto”.

El calendario establecía que a finales de enero tenía que estar identificada toda la población absentista de la localidad, y también que el personal para desarrollar este programa tenía que estar contratado a primeros de febrero, cuando la resolución se recibió el 29 de diciembre.

También se establecía la obligación de contratar a tiempo, y si no se hacía se derivaba de ello la imposibilidad de participar en dicho programa. Por todo lo anteriormente expuesto, el Ayuntamiento manifestó a través del escrito su renuncia a ejecutar en El Puerto de Santa María dicho proyecto, perdiendo así esta ayuda que hubiese podido contribuir a la puesta en marcha de un novedoso programa social.