Entre el 27 y el 30 de noviembre de 1974 Isidoro Valcárcel realizó en Córdoba un ejercicio de lo que definió entonces como "arte sociológico": el estudio sobre el terreno de una zona que abarcaba alrededor de 300 calles y plazas, con mediciones, mapas, cartografías y encuestas a viandantes. El objetivo era desarrollar in situ un acercamiento al espacio urbano y habitado a través de distintas acciones. Y también, según recuerda ahora, quitarle solemnidad al hecho de la creación artística. El resultado puede verse en el C3A cordobés hasta el 7 de enero de 2018.

Hay aquí un artista que no va en busca de la "gran obra", dice, sino que a partir de una idea se lanza a un proceso de "intromisión" en la realidad y lo cotidiano. Es un ejercicio de desmitificación, "pero hecho con conciencia y jugándome el tipo", dice el artista murciano, ganador del Premio Velázquez en 2015 a pesar de que siempre se ha desenvuelto a distancia de los aspectos mercantiles del arte.

Se trata de un ejercicio de desmitificación, "pero hecho con conciencia", precisa el artista

Este trabajo "tuvo un sentido en su momento", señala el murciano, que realizó estos ejercicios (que incluyen mediciones "absurdas e ineficaces") "sin compromiso ni responsabilidad". Fue en Córdoba como podía haber sido en otro sitio, cuenta. Lo primero que hizo fue un estudio previo sistemático de la trama urbana de la ciudad mediante planos procedentes de una guía turística. Sobre el terreno entendió o confirmó que las representaciones que los planos hacen de la realidad son habitualmente reductoras y a su vez producen una realidad propia. El artista se propuso examinar estas diferencias y para eso contó con la colaboración de ciudadanos a los que entregó una tarjeta como testimonio de su participación en el proyecto.

"Si el espectador de esta obra histórica analiza y reproduce en la actualidad sobre los mapas los ejercicios aquí propuestos, no sólo reactivará la pieza, sino que también entreverá que en ella puede vislumbrar Córdoba tanto a través de su trama urbana como de un análisis artístico sistemático y riguroso, al mismo tiempo que podrá contemplar en qué se produce y reproduce el conocimiento del espacio", señalan los responsables del C3A sobre este proyecto del artista nacido en Murcia 1937, para el que el "el arte es, sencillamente, el espíritu con el que se afrontan las situaciones". Valcárcel hace en otro ejercicio una visita turística por la ciudad de la mano de un guía y anota el elenco completo de los nombres propios que este utiliza.

Además, en el marco de esta exposición el C3A desarrollará dos talleres dirigidos por el artista sevillano Rubén Barroso, especialista en arte de acción y alma del festival Contenedores. Junto a esta iniciativa, otras actividades se pondrán en marcha para "activar" la exposición, según explica Rodríguez Fominaya antes de recordar que Valcárcel es, fuera de toda duda, como "un referente clave del arte contemporáneo en España".

Esta muestra, explica por su parte Álvarez Reyes, se inserta en el "discurso" que el espacio artístico cordobés propone en sus primeros meses y sirve de "transición" entre la exposición dedicada a Pepe Espaliú, abierta hasta el 3 de septiembre, y Constelaciones. Poesía experimental en España (1963-2016), que podrá verse a partir del 18 de ese mes, cuan do llegará procedente del prestigioso Musac de León.