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Artistas de Jerez

Toni García Falla: La esencia pura de la orfebrería

Toni García Falla, en plena labor de orfebrería.

Toni García Falla, en plena labor de orfebrería.

La orfebrería es el trabajo artístico realizado con oro, plata u otros metales preciosos. Su historia se remonta a lo más antiguo de las civilizaciones y ha llegado, de manera, viva y activa hasta el presente más inmediato. Micenas, Tartessos, Egipto, Al-Andaluz, los fenicios, los imperios precolombinos, la Europa del Renacimiento y del Barroco… hasta llegar a la gran pujanza que hoy tiene gracias al auge manifiesto de las hermandades y cofradías que adquieren piezas para sus importantes ajuares procesionales, es el apasionante recorrido histórico de una realidad artística que conserva todo su esplendor.

No ha sido la orfebrería, sin embargo, como ha ocurrido con otras artes, excesivamente bien tratada por la historiografía canónica; considerándosele como menor ante el prestigio de otras – pintura, escultura, arquitectura -. Los santones que manejan el asunto artístico se han empeñado en distinguir artes mayores y menores. A estas alturas creo que tal posición interesada es absolutamente absurda. Lo artístico no tiene grados; o, mejor dicho, sólo existe la valoración que dimana de lo que es bueno de lo que es malo. Las obras de orfebrería que son buenas no son sino obras de arte espectaculares que encierran la misma importancia que aquellas otras expresiones artísticas poseedoras de una absoluta verdad creativa. No valen distinciones interesadas que, en estos momentos, no tienen la menor entidad.

Uno de los trabajos de García Falla. Uno de los trabajos de García Falla.

Uno de los trabajos de García Falla.

Toni García Falla es un artista con mayúsculas. No me cabe la menor duda de ello. Es orfebre heredero de un arte sin tiempo ni edad; transmisor de una realidad creativa que hace trascender los grandes valores de una profesión que nos ha dejado piezas considerables de una altura artística tan significativa como cualquier otra salida de las manifestaciones consideradas – con poco criterio - como superiores.

Antonio García Falla es jerezano de 1973; se encuentra, por tanto, en plena joven madurez creativa; esa que saca partido a lo mejor de cada uno y te posiciona en un estamento artístico llena de solvencia, sensatez y hasta suma trascendencia. Empezó en la profesión en el taller de platería familiar donde aprendió las complejidades del oficio y comenzó a adentrarse por los vericuetos de un arte para el que tenías que tener muchas condiciones y saber amoldarte a las exigencias creativas que imponía una profesión con muchos matices para la que tenías que estar muy bien preparado. Hasta el taller pronto comenzaron a llegar importantes encargos de muchas de las corporaciones religiosas que necesitaban restaurar enseres antiguos o bien crear otros nuevos para patrocinar y potenciar una religiosidad popular cada vez más abierta y con mayor número de necesidad en un universo que se hacía más grande y con más vocación de argumentar plásticamente las esencias de una tradición que se quería y se necesitaba eterna. Faroles, pértigas, potencias, coronas, candelerías, libros de reglas, carretas de simpecados, respiraderos, faroles… salen de las manos del artista, bien de nueva factura o restauradas debido al paso inexorable del tiempo. Sus trabajos se hacen imprescindibles para conocer el desarrollo artístico de nuestras hermandades y cofradías y, la valía de los mismos, hacen que su nombre traspase fronteras y se le reclame en otras muchas localidades. El número de grandes obras salidas de las manos de Toni Falla es incontable y sus piezas de una calidad que no ofrecen duda. Por citar sólo algunas de sus realizaciones, nombrar los candelabros de cola del paso de palio de María Santísima del Refugio, de la hermandad de la Paz de Fátima; la corona, potencias del Señor, cáliz en plata, libro de reglas y corona para la Virgen de la Hermandad de la Cena de Jerez; paso procesional de Nuestra Señora del Rocío del Puerto de Santa; candelabros de cola del paso de palio de María

Santísima del Socorro, de la Hermandad del Cristo de la Viga; candelería del paso de la Virgen de la Estrella de Jerez, así como una peana para cultos y ciriales de salida. Trabajos importantes que se completan con numerosísimas restauraciones de piezas de verdadera categoría y trascendencia artística e histórica, como es la magnífica Urna del Santo Entierro de la Hermandad de la Piedad, obra destacada de Juan Laureano de Pina; autor asimismo de la Custodia de la iglesia de San Miguel, en la que Toni Falla realizó importantes trabajos de consolidación estructural. Pequeña selección de entre los muchísimos trabajos que el artista ejecuta con precisión, sapiencia e infinito sentido artístico.

Toni Falla acertaba con sus trabajos, promulga una estética que llegaba a todos porque era sabia y hace trascender una verdad artística, transmisora de los grandes postulados del clasicismo, ese que es inmortal, eterno, que abre las perspectivas de un arte ajeno a modas y a intereses espurios de unos pocos enterados. La orfebrería de Toni Falla no ofrece duda, juega con los criterios que interesan a una mayoría y que no son nada más que las bellas e imperecederas maneras que el tiempo nos ha legado para su conservación, custodia y mejora.

Toni García Falla, como los grandes artistas orfebres de todos los tiempos, dispone de infinitas cualidades formales; es gran dibujante; no podía ser de otro modo, que traslada sus exactas grafías a sabios esquemas compositivos para distribuirlos en la propia estructura del espacio donde se realiza; tiene una capacidad absoluta para ordenar la idea y hacerla patente en la materia. Conoce los planteamientos del oficio; sabe expandirlos con exactitud y, además, goza de un personal lenguaje que hace nuevo el eco de lo antiguo. Por eso, su obra posee un sello indiscutible, conseguido con el entusiasmo por una profesión que magnifica y hasta sublima la esencia imperecedera de lo bello.

Toni Falla es un artista que nos sitúa en los complejos testimonios de un oficio antiguo que él consigue hacerlo permanentemente nuevo.

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