Tono mixto en los principales mercados de renta variable europeos tras las declaraciones de la presidenta del BCE posteriores a la reunión del organismo monetario. No obstante, los movimientos en las cotizaciones fueron ayer moderados.

En un contexto en el que la escasez de materiales y los problemas en las cadenas de suministro globales continúan presionando al alza los niveles de precios a nivel mundial, el principal foco de atención se centró en las conclusiones de la reunión de política monetaria del BCE. El Consejo de Gobierno del organismo europeo comunicó su decisión de desacelerar el ritmo de su Programa de Compras de Emergencia Pandémica (PEPP) en este último trimestre, argumentando que la progresiva recuperación de la economía de la Eurozona podría mantenerse con menos estímulos monetarios.

Adicionalmente, el BCE reiteró su compromiso de mantener el programa de compras de 1,85 billones de euros al menos hasta marzo de 2022, en un escenario en el que la actualización de las previsiones trimestrales ha mostrado que la inflación no alcanzará su objetivo del 2% a corto plazo. En este sentido, las proyecciones del organismo europeo sitúan el avance del nivel de precios en un 2,2% este año y un 1,7% en 2022.

En este entorno, entre las bolsas de la Eurozona destacó ayer la caída del Íbex 35 español de un 0,43% hasta 8.801 puntos, contrastando con las ligeras subidas registradas en los índices de Francia y Alemania.