La jornada experimentó ligeros ascensos en los principales índices mundiales a la espera de la publicación de las actas de la Fed, que podrían ratificar las previsiones de una ralentización en el ritmo de subidas de los tipos de interés.

El miedo a la recesión económica sigue marcando el sentimiento del mercado, y los inversores valoraron positivamente el índice de gestores de compras (PMI) adelantado de noviembre en la Eurozona, que aunque se mantuvo en la zona de contracción, ha mostrado un aumento a 47,8 puntos, frente a 47,0 esperado y 47,3 en octubre.

En Alemania, el Bundesbank reflejó en su informe mensual que la inflación del país podría mantenerse en dos dígitos a medio plazo, más allá del cambio de año. Por su parte, el ministro de finanzas, Christian Lindner, comentó que la inflación es la amenaza más seria para la economía, mientras que una recesión es grave pero manejable.

En Europa, el Eurostoxx 50 ganó un 0,42%, alcanzando su nivel más alto desde el inicio de abril. Así, el FTSE MIB destacó con una caída de un 0,04%. El indicador europeo Stoxx 600 avanzó impulsado por las empresas de tecnología, financieras y materiales, frente al sector de servicios públicos, energía e inmobiliario, que registraron pérdidas.

En España, el Íbex 35 cerró por encima de 8.300 puntos tras subir un 0,07%. Entre sus componentes, las mayores revalorizaciones se situaron en Grifols (2,07%), Solaria (1,34%) e Inditex (1,30%). En contraste, las mayores caídas se registraron en Rovi (-10,17%), Endesa (-5,10%) y Acerinox (-1,07%).