La segunda temporada de Fariña

Si la provincia de Cádiz era hace unos años una entrada privilegiada para el tráfico de hachís, hoy lo es para la cocaína. La segunda parte de ‘Fariña’ la podemos rodar aquí. Nos hemos olvidado de la tragedia de los 7 guardias civiles de Barbate, uno de los sucesos que más impresión causó por la homicida falta de medios en comparación con la potente capacidad de las mafias.

La Fiscal Antidroga de Cádiz nos avisa de que lejos de estar combatiendo con suficientes recursos esta amenaza, la cocaína aumenta su flujo de entrada con más violencia, armas de asalto de grupos militarizados y prácticas como asesinatos, torturas y ajustes de cuenta; como lo que hemos visto en la serie ‘Narcos’ pero a la gaditana. Hay más cocaína en el mercado, es barata, no le afecta la inflación y ha aumentado el consumo de forma considerable porque se ha socializado su uso.

¿Qué hace el Estado? No lo suficiente ¿por qué, si tiene detectado el problema? Se me escapa pero la imaginación vuela, quizá por un poco de cada cosa que usted, amable lector, quiera pensar. Hace falta equipar de verdad a nuestra Policía y Guardia Civil para que tengan mejores medios que las mafias que están a la última, retribuirlos adecuadamente, darle una vuelta al Código Penal y tener un plan para impedir que las mafias internacionales se asienten en nuestro país a través de la fuerte inversión inmobiliaria y de negocios que inunda a Andalucía, atrapar su dinero antes que la droga; si no, nos convertiremos en unos años en una pequeña réplica de Medellín, Cali o Calabria. ¿Alguien en el poder está pensando en cómo solucionar esto?