La Rondeña: el sueño de un pastelero de Málaga que perdura en Sanlúcar de Barrameda

Cualquier día del año es fácil encontrar y saborear deliciosos productos de La Rondeña, pero en esta época del año aún más. Parece que las generaciones actuales hemos crecido con ella y es que es así. Con apenas 19 años, un joven Juan Jiménez Domínguez, nacido Ronda (Málaga), se inició en el dulce mundo de la pastelería. Pronto se encendió en él la llama del emprendimiento.

Una vez formado Juan, acompañado de Carlos, Luis y Paco, sus hermanos, marcharon hasta Sanlúcar donde empezaron a trabajar en la pastelería La Rosa que era de la familia “Castilla del Valle”, un negocio que terminaría comprando más tarde. En el año 1961, convertido ya en un vecino más de la ciudad gaditana de Sanlúcar de Barrameda, decide adentrarse en el negocio de la pastelería. Instaló un obrador en una de las estancias de su hogar, y comenzó a vender los pasteles. Creó la empresa familiar bautizándola con un nombre que hacía honor a sus orígenes. En la actualidad, La Rondeña se encuentra situada en la avenida homónima del municipio sanluqueño.

Dulce estrella

De La Rondeña son muy conocidos dulces como el Desayuno o la Masa Real, gracias a la perseverancia y dedicación, base de su negocio. Ofrece productos de gran variedad, pastelería artesanal, bollería tradicional andaluza, bombones, polvorones, mazapanes, mantecados y otras especialidades navideñas. De todos, sin duda, el producto estrella es la famosa Masa Real, popularmente conocida entre los amantes de esta empresa como las Rondeñas, una receta inimitable de pastelito relleno de cabello de ángel, que fue creada por su fundador, Jiménez Domínguez. Según cuentan algunos, fue toda una revolución, ya que llegó a competir en los bares con el pan con manteca y los churros.

Ponen en valor el producto, su calidad, sabor e inigualable presentación. Y tanta dedicación se ve recompensada. La Rondeña se ha convertido en una empresa referente en la provincia de Cádiz y Andalucía. En La Rondeña, contamos con una gran red de distribuidores a lo largo y ancho de la península y, además, gracias a la venta online, envían los productos a todo el territorio europeo. En pleno corazón de Jerez, en la plaza del Arenal, cuentan con un establecimiento, La Dulcería de La Rondeña, abierto todo el año.