Prosigue el calendario otoño-cofradiero con un buen número de actos que están relacionados directamente con las hermandades de la ciudad. Procesiones, mesas redondas, exposiciones y cultos van desarrollándose en un mes que está especialmente dedicado a los fieles difuntos.

Si bien gran parte de las corporaciones destinan sus misas mensuales a la memoria de los cofrades fallecidos, en los altares aparecen las dolorosas vestidas de negro en signo del luto que María Santísima tuvo que guardar por la muerte de Cristo. Una simbología que las cofradías cuidan especialmente que ofrece a los cofrades la posibilidad de ir a los templos para contemplar a las imágenes vestidas de negro.

Gran parte de las titulares marianas se pueden admirar de una forma un tanto más austera y con el predominio del color negro. Siendo para los vestidores uno de los tiempos más importantes de trabajo. Así hasta que llegue la festividad de la Purísima donde el negro se tornará en tonos azules.

El ciclo otoñal prosigue con el traslado de María Auxiliadora de Monte Alto que irá hasta la parroquia de San Miguel con motivo de los 125 años de la presencia del centro educativo salesiano en la ciudad de Jerez. El martes día 8 a las 20 horas, en el templo parroquial, tendrá lugar una eucaristía que estará presidida por monseñor José Rico Pavés, obispo de Asidonia-Jerez.

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