Aún con la sensación de haber podido sumar tres puntos, Chema Jiménez tiene claro que "para hacer bueno el punto de Albacete tenemos que ganar a la Ponferradina. De hacerlo, nos meteríamos con 23 puntos y en una situación privilegiada".

El meta azulino, tras recuperar la titularidad hace unas semanas, admite que "poco a poco me voy sintiendo mejor, ya sabemos cómo es el puesto de portero", si bien es consciente de que en cualquier momento "si cometes un fallo, puedes perder la titularidad, el míster tiene esa filosofía y es respetable".

"Salir al campo sales igual, lo que sí está claro es que el día que tengas una mala tarde igual el míster te puede volver a cambiar. Eso es algo que no se piensa, porque si no, perderíamos la concentración y no estaríamos metidos de lleno. Intento trabajar y confiar en mí mismo", añade.

Chema confiesa que la irregularidad exhibida por el Xerez en esta primera parte del campeonato "no tiene mucha explicación, si lo supiésemos, lo hubiésemos arreglado ya. Creo que es un tema de actitud colectiva, de salir a los partidos totalmente metidos todas las semanas. No puede ser que un día salgamos enchufados porque jugamos con los de arriba y otro nos falte cierta chispa, sobre todo cuando jugamos con los de abajo".

Con la lección ya aprendida tras caer ante el Huesca, un equipo que también llegó a Chapín en descenso, el alicantino considera que "si sales dormido, como ocurrió ese día, te enchufan tres golazos o te ganan el partido de chiripa, y se te queda cara de tonto. No podemos dejar escapar más puntos en Chapín, que no es que estemos demasiado mal, pero este equipo siempre se ha caracterizado por ser un equipo rocoso en nuestro campo y salvo algún empate concreto las victorias no se escapaban".

A pesar de todo, para el xerecista, sumar 20 puntos en 14 jornadas "son buenos números". A su juicio, "la gente no se molesta por la situación en la tabla, sino por el juego. La situación de nerviosismo, de malestar, puede venir sobre todo por el juego del equipo más que por los puntos. El equipo en puntos está en una posición cómoda y creo que el tema es que en Granada te metan cinco, que luego hagas un partido ante el Valladolid muy bueno y que luego vayas a Albacete y hagas un partido espeso. El tema tiene que venir por ahí, que seamos un equipo más regular, para lo bueno o para lo malo, y no tengamos esas dos caras que la gente está viendo. Tenemos que trabajar para que todos los partidos salgan en una línea general de buenos resultados y buen juego y los días que no se pueda jugar bien, que puede pasar, intentar no perder puntos en partidos raros. Eso es lo que al final nos dará estar lo más arriba posible".

Poco dado a hacer números, el arquero azulino confía en sumar "al menos seis puntos de los nueve que nos quedan de aquí a final de año. Sería bueno sacar los dos de casa y luego en Las Palmas tratar de arañar algo".

De lo que no tiene dudas es que este Xerez "tiene mucho más margen de mejora de lo que aparenta. Creo que hay futbolistas para jugar mejor de lo que lo hicimos el otro día en Albacete. Debemos aspirar a eso, no podemos ceñirnos a jugar como los de abajo porque tenemos más equipo. Quizás no tan bueno como los de arriba pero sí para hacer buen fútbol y estar ahí peleando, esa debe ser nuestra línea a seguir".