"No confian en nosotros pero no lo dicen a la cara"

Martín Mattos, Christian Löbenstein yRafael Mateos cargaron duramente contra los administradores concursales a los que acusaron de estar influenciados por Fernández Monterrubio. Preguntado por esta circunstancia, Mateos se sinceró: “Yo creo que sí. Están más a favor de Monterrubio que de nosotros. No dudo de su profesionalidad pero sí que están más a favor de Monterrubio que de nosotros”. Además, el jerezano insistió en que a partir de ahora “Monterrubio es el que va a mandar”.

En esa misma línea de afrenta contra los administradores se mostró Mattos al ser cuestionado por la posible desconfianza de éstos en Federico Souza y su grupo de colaboradores. “Nunca confiaron en nosotros pero nunca nos dijeron en la cara ‘no confiamos en ustedes por esto, esto y esto’. Necesito, para tener confianza, esto, esto y esto. Era todo sí, todo bien y después al otro día a empezar las negociaciones. Entonces, llega un punto en el que se acaba el tiempo y en una empresa deportiva el tiempo es fundamental, por eso hasta aquí llegamos”.

Una vez en este punto, les preguntaron, ¿para qué se quedan? Según Löbenstein, “seguimos en el club porque Federico sigue siendo el máximo accionista con un 52 por ciento. Cuando nos interesamos por comprar el club se evaluaron otros procesos concursales en otros clubes de fútbol y en ninguno de ellos ocurrió esto. Los clubes con los que hemos hablado nos dicen que en ningún caso los administradores les han pedido aval y que los administradores están a diario, de forma operativa, en el club para tomar las decisiones que tengan que normal. Respecto a otras sociedades anónimas, tampoco es normal que se pidan avales por todo. Uno nunca pudo haber previsto esto, por eso a nosotros esta circunstancias nos sorprendió. No sé si hay un empeño o algún otro motivo por el cual se nos está castigando de otra manera”.

Para Löbenstein, esta decisión no significa que “tiremos la toalla. No podemos hacer trabajos ejecutivos, ni siquiera podemos pedir un despido, ni firmar la carta de despidos nosotros, pero ni Federico Souza ni el consejo. Ante esta situación o cometemos una ilegalidad o nos mantenemos de esta forma”.

El último achaque a los administradores lo expuso nuevamente Löbenstein: “Recuerdo cómo se inicio esto. Cuando desembarcamos en enero yo ingresé como consejero y quise colaborar con la parte ejecutiva y financiera. Federico Lussenhoff vino como asesor del presidente y quiso colaborar en la parte deportiva, todo esto a coste cero para el club. Hubo una denuncia de esta irregularidad y nos dijeron que no podíamos estar por fuera, sino que teníamos que formar parte de la nómina del personal ejecutivo a pesar de que era a coste cero para el club. Hoy hacemos esta propuesta de viabilidad, queremos ingresar en el órgano ejecutivo del club y también nos dicen que no. Ahora ponen la excusa del aval porque en enero no había ningún coste para el club”.