El duelo de porteros brasileños de la Liga se decantó del lado de Diego Alves, que en la primera parte tuvo bastante tarea pero en la segunda se limitó a presenciar el encuentro como un espectador más, ya que el Xerez apenas le llegó.

El partido en sí tenía como aliciente el enfrentamiento entre los dos únicos cancerberos cariocas de la competición, dos porteros con características similares y que demostraron, cada uno a su manera, sus buenas condiciones bajo los palos, donde los porteros sudamericanos suelen ser muy activos y rápido de reflejos.

En el primer periodo, las llegadas del Xerez hicieron trabajar más de la cuenta a Diego Alves, pues en la primera mitad el Almería inquietó poco al marco contrario.

El ex de Atlético Mineiro fue protagonista en varias ocasiones, pero sobre todo en el minuto trece del primer periodo al desviar un balón envenenado de Chico que se colaba en su portería tras centro de Abel Gómez. El brasileño rectificó sobre la marcha y sacó una mano espectacular mandando a córner el que hubiera sido primer gol del conjunto visitante.

Por contra, en el marco de su compatriota el peligro pasaba de largo y las únicas aproximaciones del rival con cierto riesgo no inquietaron a Renan, cuyas intervenciones nunca fueron cruciales. Sólo una combinación entre Corona y Piatti llevó algo de peligro, pero el meta la abortó bien. El azulino se mantuvo en su sitio, mandando a la zaga y tratando siempre de sorprender con saques largos, una de sus especialidades.

Sin embargo, tras la reanudación la tónica cambió porque a partir de entonces el Almería dominó por completo y poco a poco puso cerco a la meta del Xerez, donde Renan fue de los jugadores más activos.

La oportunidad más clara de los almerienses salió de las botas de Domingo Cisma nada más comenzar la segunda mitad. El sevillano agarró un rechace en la frontal, le pegó con intención y Renan tuvo que sacar los puños para enviar el esférico a córner ante el estupor de la afición andaluza.

Como de costumbre, el meta xerecista a punto estuvo de complicarse la vida en los últimos instantes del encuentro en un balón que se le escapó en presencia de Piatti, pero afortunadamente reacción con rapidez despejando la pelota fuera de banda.

Nada pudo hacer el xerecista en el gol de Ortiz, con una nube de jugadores delante, ni en el balón previo al travesaño del propio futbolista.

En el bando rival, Diego Alves se limitó a presenciar el choque desde su área pues las únicas aproximaciones del Deportivo ni siquiera terminaron en disparo. Únicamente Mario Bermejo lo intentó en los últimos minutos de la segunda mitad, pero su lanzamiento, casi sin fuerza y cayéndose, se marchó al lateral de la red del arquero carioca.

Al final, los puntos se quedaron en el estadio Juegos del Mediterráneo de Almería, pese a que el nivel exhibido por uno y otro portero fue más o menos similar, pues ambos evitaron alguna que otra clara ocasión de gol.