El fiscal jefe, José Antonio Martín-Caro, no consideró ayer "adecuado" llevar a un programa televisivo "parte de una causa que está parcialmente decretada secreta", como la desaparición de Ruth y José. "Si es para hablar de cosas genéricas, nada que decir; pero si es para dar detalles concretos que están en la causa, parte de la cual está declarada secreto y en todo caso no es pública, porque no hemos llegado a la fase de juicio público, pues no me parece adecuado", dijo Martín-Caro después de que el jefe de la investigación, el comisario Serafín Castro, haya aparecido en las últimas horas en varios platós de televisión.

El Ministerio Público se guía "por lo que se puede probar ante los tribunales y no por opiniones personales, que no cuentan para nada en esto", defendió Martín-Caro. Por tanto, si se confirma que los restos óseos de la hoguera de Las Quemadillas son de humanos y correspondieran a los niños, "se cambia la imputación" contra José Bretón, padre de Ruth y José, pasando de detención ilegal y simulación de delito a dos delitos de asesinato, algo que "implicaría la transformación en un procedimiento de jurado". "Si todo sigue por donde parece que va a seguir, lo lógico es cambiar el procedimiento que actualmente sigue como sumario a procedimiento de jurado, con lo que implica algunos cambios, pero todo lo que se ha hecho hasta ahora conserva su validez", explicó.

En cuanto a las agravantes a las que se pudiera enfrentar Bretón, el fiscal explicó que "se verán cuando se compruebe qué se puede probar", de manera que "ahora son todo especulaciones". "Cada uno tiene derecho a decir las tonterías que quiera", zanjó.