La selección española se clasificó para la segunda fase del Eurobasket femenino tras arrollar ha la de Ucrania por 85-59 en la segunda jornada del Grupo A. Tras ganar el domingo a las checas por 66-59, España selló su pase a costa de Ucrania gracias a la contundencia de sus jugadoras altas y a la velocidad de las exteriores que rompieron continuamente la primera línea ucraniana.

Los primeros puntos de España llegaron desde la pintura. El tándem Montañana-Lima inició el parcial de 8-0 y en defensa se aplicó a conciencia. La primera canasta ucraniana fue un triple de Ogorodnikova que sirvió arrancar un parcial de 4-11 que las metió en el partido. Cuando Ucrania parecía que entraba en el encuentro llegó la segunda personal de Gorbunova, pero el técnico la mantuvo en cancha y logró igualar la contienda hasta el 13-13 del minuto 8. Una gran acción entre pívots permitió a Montañana anotar la canasta que dio la ventaja momentánea a España al final del primer cuarto (15-13).

La superioridad clara llegó bajo los aros. Con y sin balón las interiores marcaban la diferencias y la entrada en pista de Pascua corroboró dicha solvencia. Isa Sánchez, en el último suspiro de la primera mitad, fue la que comenzó a romper el choque a favor de las españolas con un primer triple que elevó la renta a 39-26.

Con la base de una gran defensa y una Torrens que pudo incluso adornarse en las finalizaciones el combinado nacional se marchó al 46-30 a los 24 minutos de juego. En ese momento, dos acciones consecutivas al contraataque, una de Biryuk y otra de Kochubei llevaron a Pérez a solicitar tiempo muerto. El técnico no quería ni por un momento relajación en las suyas y éstas volvieron a la pista dispuestas a decidir el choque (52-36).

El ritmo español resultó insoportable para Ucrania que veía demasiados frentes abiertos como para poder hacerles frente, si no era una costa a costa de Torrens o Domínguez era un balón interior para Lima o un triple de Palau. Éste último elevó al luminoso la renta más alta, 63-46.

En el último cuarto Pérez dio descanso a las que más minutos acumulaban. Pero el ritmo no disminuyó y tampoco el acierto.