Esperpento de la Balona ante el filial sevillista (5-3)

SEVILLA ATLÉTICO: Néstor, Manu, Israel Puerto, Atienza, Samu, Luismi, Jozabed (Menudo, 87'), Jony (Marrufo, 67'), Alberto Moreno, Rabello (Joaquín, 79') y Álex Rubio. BALONA: Pagola, Dani Gallardo, Carlos Guerra, Joe, Mario (Abraham, 48'), Ismael 'Chico', Rubén Cuesta (Salvi, 48'), Curro, Ocaña (Alberto Merino, 70'), Copi y Bello. Árbitro: Pérez Peraza, amonestó a los locales Atienza, Rubio y Moreno y a los visitantes Mario, Dani Gallardo, Ocaña y Bello. Goles: 1-0 (3') Jozabed. 1-1 (28') Rubén Cuesta. 1-2 (38') Copi. 2-2 (39') Mario, en propia puerta. 3-2 (42') Atienza. 3-3 (62') Copi. 4-3 (65') Álex Rubio. 5-3 (81') Samu. Incidencias: Partido jugado en la Ciudad Deportiva José Ramón Cisneros de Sevilla ante unos 300 espectadores.

Si Valle Inclán no hubiese inventado el esperpento cualquiera del centenar largo de balonos que acudió ayer a la Ciudad Deportiva José Ramón Cisneros hubiese tenido una oportunidad única de usurparle ese derecho. La centenaria Balompédica desaliñó ayer su historia enseñando sus vergüenzas ante un filial, el del Sevilla, que se compadeció al final y le perdonó una goleada aún mayor, de esas que perdurán en la memoria a lo largo del tiempo.

Los de La Línea son incapaces de tapar las vías de agua de una retaguadia inquieta, poco resuelta y frágil hasta desesperar a su gente. Vulnerable por todos sus flancos. Marcar tres goles fuera de casa y volver de vacío es mucho más que un síntoma. Es la demostración incuestionable de que el equipo necesita mucho más que pasar por chapa y pintura.

Rafael Escobar se cubrió de gloria el viernes cuando defendió ante la prensa que la defensa de esta Balona es mejor que la de la campaña precedente. O se engaña o trata de hacerlo con el entorno.