Jordi Alba abre mucho los ojos

La selección española comenzó ayer su concentración para preparar los dos próximos compromisos internacionales, ante República Checa y Escocia, con el joven lateral zurdo Jordi Alba como principal novedad. España, ya clasificada para la Eurocopa, afrontará los dos últimos partidos de la fase de grupos con un doble objetivo: fortalecer la solidez del grupo y mostrar honradez deportiva, por cuanto sus rivales se están disputando la segunda posición del cuadro.

El defensor valencianista Alba fue, con diferencia, el rostro más alegre de los convocados, pues comenzó a vivir su primera convivencia con la selección campeona del mundo y de Europa.

"Para cualquier jugador su sueño es acudir a la selección absoluta. Es una alegría muy grande para mí. Estoy encantado de estar con todos estos jugadores", afirmó antes de entrar a conocer a sus compañeros. De esta forma, el Valencia volvió a tener representación en la selección española después de vender sucesivamente a Raúl Albiol, David Villa, Carlos Marchena, David Silva y Juan Mata.

Jordi Alba agradeció a su entrenador, Unai Emery, su aportación al éxito: "Fue un hombre clave para que ocupe este puesto de lateral. Me ha dado confianza y gracias a él estoy aquí". El jugador del Valencia no quiere marcarse límites y no desea mirar más allá de esta convocatoria. "Hay muchos jugadores que pueden jugar en el lateral izquierdo. Me ha tocado a mí y voy a intentar aprovechar esta oportunidad", destacó. Y añadió: "Estar aquí es lo máximo. Vengo a aprender para, desde aquí, ir entrando poco a poco. Me siento lateral, llevo dos años y unos meses jugando en esta posición. Veía muy lejano estar aquí y quiero aprovecharlo. Ojalá algún día pueda jugar una Eurocopa".

Negredo fue el último en llegar, con 20 minutos de retraso. El jugador del Sevilla estará en el centro de las miradas por la pugna que mantiene con Fernando Torres y Fernando Llorente por ser el delantero titular de La Roja. Sin embargo, se sometió a una resonancia magnética para comprobar la evolución de las molestias musculares con las que se incorporó a la selección, que desveló un alto riesgo de lesión y provocaron que abandonase la concentración. Del Bosque en su lugar no llamará a nadie.

Como viene siendo habitual en las últimas convocatorias, lo primero que hicieron los internacionales fue dedicar la mañana a actos institucionales. Así, se cambiaron de ropa en las habitaciones de La Ciudad del Fútbol para dirigirse a la sede del Consejo Superior de Deportes (CSD), donde recibieron la medalla de oro de la Real Orden del Mérito Deportivo.