La selección española encara hoy (21:00) en Liubliana (Eslovenia) su undécima semifinal de la Eurocopa. Siete de ellas las resolvió después con un título. Para levantarlo en esta ocasión deberá superar primero su penúltimo reto: doblegar a Kazajistán, que exigirá su mejor versión.

La selección española, de menos a más en el torneo, desde el decepcionante 4-4 con Francia en el comienzo de la fase de grupos y el triunfo apurado ante Azerbaiyán (0-1) hasta la victoria sobria en los cuartos de final ante Ucrania (0-1), ya está a solo dos choques de un éxito logrado ya en 1996, 2001, 2005, 2007, 2010, 2012 y 2016.

Aún sin su mejor fútbol sala, aún sin la esperada productividad goleadora -sólo ha anotado dos tantos en los últimos dos choques, los dos de Pola-, pero sí reencontrado con la firmeza, sin conceder apenas nada a Ucrania el pasado martes, sin goles en contra en los dos partidos más recientes y todavía como máxima favorita.

Para el encuentro de este jueves, el seleccionador José Venancio López está pendiente de Sergio Lozano, lesionado en el partido de los cuartos de final contra Ucrania y seria duda para el choque, el penúltimo obstáculo de España hacia otro título europeo. En la final del sábado espera el ganador del duelo entre Portugal y Rusia.