Jornada dominical de muchos quilates para dos de los tres equipos jerezanos en Primera Andaluza. El liderato estará en juego en Chapín y en La Granja en los enfrentamientos entre el Jerez Industrial, que marcha primero con 25 puntos, y Racing Portuense, tercero con 23 y que es la única escuadra invicta del grupo, y Xerez DFC B y Cádiz Balón, que es segundo con 24. Más emoción no se puede pedir.

La matinal la abrirá a las doce el cuadro de Bruno Herrero, que llega después de lograr un trabajado empate ante el Trebujena, contra un conjunto rojiblanco que se está mostrando muy regular, que lejos del José del  Cuvillo ha disputado cinco partidos, ha ganado tres y empatado dos.

Es un gran reto para los blanquiazules, que van a tener la oportunidad de jugar en Chapín por la resiembra del Pedro Garrido tras la polémica suscitada durante la semana por la negativa del Ayuntamiento en un primer momento de cederle el Municipal por el estado del césped.

El club ha hecho un llamamiento a la afición y espera una gran entrada. Para seguir al frente de la tabla sin depender del resultado de los otros equipos que optan al liderato, los industrialistas tienen que quedarse con los tres puntos. Para ese partido y para lo que resta de temporada es baja el joven atacante Rubén Zambrano, que sufre una rotura del ligamento cruzado anterior de su rodilla izquierda. 

Duelo de filiales

En la Granja (13:00) se verán las caras Xerez DFC B y Cádiz Balón en un enfrentamiento siempre atractivo. Los azulinos rompieron la pasada jornada su racha de cuatro derrotas consecutivas con una igualada a dos frente al San Bernardo, pero cayeron a puestos de descenso, y su rival llega lanzado. Reforzado por la decisión del TADA, que le dio la razón en la petición de alineación indebida que realizó el Guadalcacín, sólo ha perdido un partido, en la tercera jornada ante el Jerez Industrial (3-2) y encadena ocho encuentros sin ceder, en los que ha logrado cinco triunfos y tres empates.

El filial azulino afronta un durísimo envite ante su afición y necesita su empuje para sumar y huir de la zona caliente de la clasificación en la que se ha metido después de enlazar ya siete jornadas sin ganar, que le están lastrando muchísimo.