Albert Rivera quiere volar solo. El líder de Ciudadanos volvió a descartar ayer que su partido vaya a apuntalar a un Ejecutivo liderado por el PP o por el PSOE tras las elecciones generales del 20 de diciembre. Si el candidato de la formación naranja no llega a Moncloa, aseguró el político catalán, será el jefe de la oposición.

"No vamos a apoyar un Gobierno de Mariano Rajoy ni Pedro Sánchez porque no creemos en su proyecto", afirmó durante un acto en Barcelona, donde alertó de la existencia de un "pacto oculto" entre PP y PSOE si finalmente Ciudadanos consigue ser la primera fuerza. "Habrá que ver cuántos escaños tenemos y este pacto oculto entre Sánchez y Rajoy", apostilló,

Rivera, que se refirió a estos comicios como una segunda Transición española, descartó también un hipotético tripartito con PP y PSOE. "Un Gobierno de España con tres gobiernos en uno no lo imagino", subrayó, para después asegurar que la carrera hacia la Moncloa se reduce ya a un pulso entre Mariano Rajoy y la formación naranja, que en su opinión se ha convertido en la "alternativa".

El presidente de Ciudadanos vaticinó que el 20-D se romperá la lógica bipartidista: "Por primera vez podemos ganar al PP sin que tenga que venir el PSOE. No habrá que escoger entre lo malo y lo menos malo". También recordó que las últimas encuestas detectan un crecimiento "imparable" de su partido, ya en segundo lugar por detrás del PP, mientras el PSOE "se hunde".

Rivera reivindicó a Ciudadanos como partido de centro capaz de generar consensos entre la derecha y la izquierda y planteó reformar artículos de la Constitución, aunque puntualizó que esta "no es la culpable de la corrupción ni del paro, ni su solución". En este sentido, el candidato del partido naranja exigió acabar con los indultos a los condenados por corrupción e ironizó sobre la creación en Albany (Estados Unidos) de un museo de la corrupción: "El Prado se quedaría pequeño".

También sugirió cambiar la ley de partidos para que sean más transparentes y celebren primarias internas, y un modelo electoral parecido al alemán con dos listas -una estatal y otra de distrito- para que los diputados "tengan que dar explicaciones en sus circunscripciones". Además, Rivera acusó a PP, PSOE y CDC de intromisión en el sistema judicial, por lo que propone concursos de mérito para elegir los puestos de los tribunales superiores o que sean los propios jueces quienes elijan a sus compañeros.