Almudena Plaza es la directora de Ikea en Jerez. La conocida tienda tiene una embajada en la Feria desde hace cuatro años. Desde entonces se ha caracterizado por el alegre colorido, por la funcionalidad de su mobiliario, por esos detalles que hacen grande a una caseta de dos módulos... Tanto es así que hay hasta quienes consideran que la Feria puede ser esa prueba de fuego que garantice la calidad (enorme por cierto) de sus tarimas flotantes. ¿No instalaría usted en su casa una tarima que ha aguantado albero, taconazos y roces durante siete días de Feria? Yo lo haría. Y sin duda.

- Por una vez se vuelven las tornas y son ustedes los encargados de montar. ¿Qué criterios siguen para decorar su caseta en Feria del Caballo?

- El trabajo de montaje no es nuestro, pero sí lo es el de decoración, el cual pasa por nuestros equipos de profesionales. Pretendemos tener aquí una embajada que ofrezca algo fresco, colorido, divertido y, sobre todo, funcional. Y creo que lo conseguimos.

- ¿En qué modelos piensan a la hora de decorar la caseta?

- Pues básicamente en que hay un ambiente de día y de noche. Todo es apilable, para poder recogerlo fácilmente, atendemos también a la edad de nuestros empleados con áreas como el parking de carritos de bebé...

-¿Repetir en decoración es un pecado?

- En los cuatro años que llevamos aquí no hemos repetido. Y es que siempre buscamos integrarnos en el tejido social y lo hacemos como entendemos que debe ser: es decir, trasladando el espíritu de nuestra tienda al Real. ¡Hasta en la cocina! Ponemos lo que gusta en Feria a un precio excelente, asequible, como en nuestra empresa. Productos típicos suecos, como las albóndigas, quedan estos días en otro plano...

- En cierto aspecto es como si el alma de Ikea se viniera al Real estos días...

- Así es. E incluso se pueden encontrar detalles en nuestra caseta como las jarras de rebujito, que son bonitas regaderas de diseño. La caseta es un espejo de nuestra tienda.

- ¿Cómo vivió usted su primera Feria?

- Soy de Madrid y soy de esas personas que se han enamorado de la Feria de día. Disfruto enormemente viendo los caballistas, la elegancia en el vestir... Me encanta. Es más, incluso creo que mantener parámetros de elegancia para caballistas y caballos ayuda a que esta fiesta siga siendo tan hermosa.