'Indalo', un negocio boyante que daba para coches de alta gama

Las tiendas de ortopedia son caras. Lo más barato que se puede encontrar son unas plantillas por las que habrá que desembolsar algunas decenas de euros. La ortopedia 'Indalo' en la calle Asta nace de un enfado, dicen quienes conocen el sector. Los propietarios formaban parte de otro conocido negocio del ramo en Jerez cuando surgieron ciertas desavenencias. Fue entonces cuando dos de sus empleados decidieron montar su propio negocio. En un primer momento lo hicieron en las inmediaciones del Tanatorio de Jerez, un lugar que se demostró desacertado ya que está especialmente alejado. Finalmente decidieron poner rumbo al centro y lo hicieron entre los castizos barrios de La Plata y Santiago.

En esta última sede llevarían aproximadamente tres años, un periodo de tiempo que coincide aproximadamente con el inicio de las investigaciones de la Guardia Civil, la cuales comenzaron cuando el Servicio Andaluz de Salud se percató de algunos desajustes.

La ortopedia, ya se ha dicho, es cara. Es decir: el coste de un carrito eléctrico para un inválico cuesta del orden de 10.000 euros y una cama articulada del orden de 3.000. Es mucho dinero. El negocio, así al menos lo aseguran los vecinos de la zona de la calle Asta, iba viento en popa pues funcionaba bien. Los propietarios tenían coches de primera gama (algunas fuentes apuntan a 'Audis') e incluso uno de ellos posee un barco con el que incluso se marchaba de vez en cuando a participar en certámenes de pesca al norte de España.

Ayer, la tienda permanecía abierta al público, como si nada hubiera pasado. Este medio intentó ponerse en contacto con los responsables pero estos continuaban en sede policial por la tarde.