Perú, Mozambique, España...

La ong Madre Coraje presentó ayer en su sede central, en la antigua azucarera de Guadalcacín, su memoria de actividades correspondientes al pasado año. Las cifras corroboran la gran trascendencia y el nivel de actividad que ha conseguido esta entidad nacida en Jerez hace más de 20 años y que ya cuenta con sedes repartidas por toda España. Más de 157.800 personas beneficiarias de algunas de sus medidas, el envío de más de 360.000 kilos de ayuda humanitaria, reciclado y reutilización de más de 5.000 toneladas de diferentes productos y la entrega a comedores sociales de unos 19.600 de productos hortícolas, entre otras, así lo atestiguan.

Su presidente de honor, Antonio Gómez, apuntó ayer: "Nos conocen por nuestro trabajo en Perú, Mozambique, pero no nos conocen tanto por lo que hacemos en España". Por este motivo, la presentación de la memoria tuvo dos ejes discursivos, la labor en pro de la igualdad entre hombres y mujeres en Perú y las actividades en España. Sobre esta última vertiente, el fundador de la asociación hizo mención de medidas tales como los mercadillos donde se pueden adquirir productos a precios simbólicos (en Jerez hay uno en la calle Bodegas), los huertos solidarios situados en la sede de Guadalcacín (que han atendido a entidades sociales de la provincia como el Hogar San Juan, Anydes El Puerto, Proyecto Hombre de Jerez y otros comedores sociales de distintas localidades del entorno), o los programas d educación para el desarrollo con iniciativas vinculadas a la educación, el voluntariado y el respeto medioambiental.

En su memoria, Madre Coraje incide en que están reforzando sus acciones en España "con el objetivo de ahondar en la importancia de la educación para el desarrollo, en la inclusión social, en el voluntariado, en el respeto medioambiental y para apoyar, de forma coyuntural, a la población española afectada por la crisis". Asimismo se quiso mostrar el fin solidario que tienen los servicios de reciclaje textil que presta la ong gracias a los numerosos contenedores de recogida de ropa usada repartidos por numerosas ciudades. El presidente de honor de la institución explicó que esta labor genera los ingresos necesarios para desarrollar sus labores de ayuda humanitaria y proyectos tanto en Perú como en Mozambique.

También se hizo referencia durante la presentación de la memoria los frutos de sus actuaciones en Perú. Para ello se contó con la presencia de Rosario Medrano y Paul Llacma, dos activistas peruanos en la defensa de los derechos humanos. Ellos esbozaron las medidas que ha llevado Madre Coraje en el país andino para fomentar la educación y la concienciación en temas como la violencia de género

En la presentación, la alcaldesa, Mamen Sánchez, señaló: "Esta organización es solidaridad en su sentido más puro ya que ha hecho valer como nadie la responsabilidad de todos a la hora de trabajar por y junto a los que sufren la injusticia de la privación de los elementos esenciales de la vida".

Durante el pasado año, la ong destinó más de ocho millones de euros a ayudas humanitarias, misiones sociales y desarrollo de proyectos, entre otros. En el exterior, se promovieron tres proyectos de desarrollo en Mozambique y otros siete en Perú con el objetivo de fomentar la economía, la educación, el respeto al medio ambiente y el acceso al agua potable.

Rosario Medrano fue premiada con la Orden del Mérito a la Mujer en el año 2013 en Perú por su lucha al frente de distintas entidades para la igualdad de la mujer. Ayer explicó que iniciativas como las que desarrolla Madre Coraje en su país permiten que las mujeres "empiecen a entender nuestros derechos" y a concienciar de que hay que crear una sociedad "libre de violencia, explotación sexual y machismo". "Antes, en tiempos pasados, era común oír decir a nuestros padres que había que respetar al hombre, pero ya conocernos cuáles son nuestros derechos y deberes", dijo. Acto seguido comentó: "Hay que seguir adelante, unirnos todos, querernos y amarnos y así mejoraremos nuestra convivencia".

Paul Llacma es un líder campesino de la comunidad de Pataypampa (Perú) y preside la asociación de promotores agropecuarios Kamayoc. Llacma destacó que la labor de Madre Coraje en su país ha permitido importantes avances en "tecnología productiva" mediante la "capacitación de jóvenes, mujeres y hombres, en el mundo agropecuario, en la salud y género". "Estamos llegando cada vez a más y más regiones e involucrando a sus alcaldes con el apoyo de Madre Coraje", explicó. El líder campesino señaló que los proyectos que desarrolla la institución permiten crear las bases de una economía productiva para el desarrollo de estas comunidades que en décadas pasadas sufrieron graves actos de violencia por conflictos políticos.