El gobierno local ha rechazado la petición realizada por la empresa que explota la zona ORA (o zona azul) en el centro de la ciudad, la compañía Setex Aparki, de suspender el servicio mientras se dure la declaración de estado de alarma por la crisis del coronavirus. El motivo es que, según el ejecutivo, la solicitud no cumple con los requisitos para acogerse a esta posibilidad por un defecto legal ya que no ha justificado la “imposibilidad” de seguir realizando esta prestación.

El mantenimiento del pago obligatorio por aparcar en las calles del centro ha generado polémica desde principios de semana cuando los controladores de este servicio demandaron no seguir trabajando al entender que el suyo no era un servicio esencial, una petición a la que sumaron los partidos de la oposición en sucesivos días.

Sin embargo, el gobierno local se aferró a que, si el Ayuntamiento decretaba la suspensión de manera unilateral, tendría que indemnizar económicamente a la empresa, extremo que no estaba dispuesto a asumir. Sin embargo, el pasado miércoles el Gobierno central modificó algunos aspectos del Real Decreto que regula el estado de alarma. Así, daba la posibilidad a las administraciones públicas de que se suspendan servicios públicos gestionados por empresas a cambio de compensarlas ampliándole el tiempo de explotación de la concesión.

El jueves, tal y como adelantó la formación Adelante Jerez, se sucedieron los contactos entre el Ayuntamiento y Setex Aparki en este sentido que se fraguaron en la presentación de una solicitud de suspensión del servicio por parte de esta compañía. Sin embargo, al día siguiente, recibió sendos escritos del Ayuntamiento (uno del director del Área de Movilidad y otro del delegado de Movilidad, Rubén Pérez) en el que se le informaba que su petición era rechazada porque no cumplía los requisitos legales.

En la misiva firmada por el delegado de Movilidad, argumenta que la normativa vigente establece un doble requisito para decretar la suspensión del servicio público. Así, en primer lugar, debe ser la empresa concesionaria la que lo pida y, segundo, debe acreditar fehacientemente la “imposibilidad de ejecución del contrato”.

Sin embargo, el gobierno considera que la petición realizada por la concesionaria el pasado jueves, aunque cumple con el primer requisito (haberla solicitado), no acredita el segundo (la justificación). Así, le reprocha que la firma alegue que puede seguir explotando la zona azul “con todas las medidas preventivas para los trabajadores” pero que ha optado por presentar la solicitud basándose en “la inquietud generalizada que existe entre todo el personal contratado”.

En la respuesta del gobierno se le informa de que esa “inquietud generalizada” manifestada no forma parte de los supuestos incluidos en la normativa para declarar la suspensión del servicio, de ahí que le exige que “motive” su petición. Asimismo, le manifiesta a Setex Aparki que el ejecutivo “no actúa por estar sometido a presiones de ningún tipo” sino que “nuestra obligación y responsabilidad es velar por el interés general de la ciudadanía de Jerez y siempre con estricto cumplimiento de la legalidad vigente”.

Tras hacer pública esta carta, el gobierno local emitió un comunicado donde volvió a insistir en no se indemnizará económicamente a la empresa. Así argumentó que, a pesar del actual estado de alarma, “empleados municipales y de empresas públicas siguen desarrollando sus trabajos con normalidad en las calles y espacios públicos equipados con los EPI [equipos de protección individual] necesarios, por tanto, ese argumento no es válido para justificar la suspensión y de hacerlo nos obligaría a indemnizar a la empresa, con el perjuicio que ello supondría y la repercusión para todos los jerezanos".