Rocío de cumpleaños para las peñas La Albarizuela, Carboneras y El Sopetón

Tres peñas jerezanas celebran efemérides en esta romería, la más longeva la de Carboneras que llega a 25 años de existencia, un cumpleaños que ha celebrado en las vísperas del Rocío con diferentes actos, entre ellos, una cena conmemorativa que se vinculó a la entrega de la pastas del pregón al pregonero de este año, acto que asume la peña desde su nacimiento. Este colectivo rociero no se ha limitado a vivir su romería, por el contrario participa y alienta la vida de la hermandad, estando integrada en la actualidad por casi una treintena de peñistas que tienen su casa en la aldea en la calle Bellavista. Con menos años de creación, la peña De la Albarizuela al Rocío llega a la década de una vida muy comprometida con el rocierismo. Su nombre delata el origen de estos rocieros que decidieron agruparse hace diez años, la Hermandad de la Coronación de Espinas. Así, conviviendo entre lo cofrade y lo rociero, este grupo sigue caminando en su vocación de vivir la romería juntos como una familia, que de hecho casi es así, sin que falte en su casa de la calle Muñoz y Pavón un precioso altar arreglado como solo la gente cofrade sabe hacerlo. Casi enfrente de esta peña, en lo que a la casa en la aldea se refiere, está la de El Sopetón que también alcanza diez años de existencia. Es un grupo amplio, muy heterogéneo y muy abierto. De hecho cada año suma más socios para vivir la romería en el ambiente de amistad que prima en su casa de Muñoz y Pavón, haciendo esquina con Bellavista. Dada esa ubicación de privilegio y por reunir a muy buenas voces, cada sábado de presentación es habitual ver a los peñistas subidos al poyete del porche de la casa cantándole a los muchos simpecados que pasan ante ella.